Ancelotti aprende de Xavi , Simeone y José Mourinho para criticar a los árbitros de La Liga

Ancelotti aprende de Xavi , Simeone y José Mourinho para criticar a los árbitros de La Liga

Se le vió molesto con la actuación de los árbitros en Sevilla

Cada vez son más los técnicos que no se muerden la lengua para criticar determinadas situaciones que perjudican a su equipo. Lo pudimos ver recientemente con el enfrentamiento entre Manuel Pellegrini y José Bordalás, pero también lo hemos visto antes con declaraciones de Xavi Hernández, del Cholo Simeone, de Zinedine Zidane e incluso del propio José Mourinho. Entrenadores que no se cortan a la hora de hablar sobre determinados temas, pero que lo hacen de forma que no se sobre pase nunca la línea que marca el límite.

Ancelotti en Sevilla

Para ello, la ironía es fundamental. Ancelotti se encuentra en ese grupo con los técnicos anteriores, y tras el partido de ayer volvió a utilizar este método para mostrar su queja sobre el árbitraje. Lo hizo en dos ocasiones y en ellas se vieron dos Ancelotti diferentes. El primer Ancelotti, el de la rueda de prensa, estaba inquieto pero sosegado. Se le notaba que no quería estar sentado en esa silla y hablar, pero lo hizo con calma: "Creo que el árbitro hizo un buen partido, hizo todo bien. Detuvo el juego para preservar la salud de un jugador. Mi opinión es que hizo un partido de mucha calidad". Le preguntaron si estaba siendo irónico, a lo que el técnico italiano respondió: "No, no, lo digo en serio. Al final sólo le pregunté por mi tarjeta amarilla, nada más, porque no me dirigía a él, sino a Camavinga".

Ancelotti grita a sus jugadores

El segundo Ancelotti lo vimos en el micrófono de Real Madrid TV, donde se le pudo ver igual de inquieto pero mucho más enfadado cuando el reportero le preguntó si había tirado de ironía en la rueda de prensa. "Sí, sí, la ironía es el único camino. Porque si digo lo que pienso me castigarán muchos partidos. Y lo que más me gusta es estar en el banquillo del Real Madrid, así que para evitar suspensiones no digo lo que pienso”.

Los motivos por los que Carlo Ancelotti estaba enfadado es porque al Real Madrid se le anularon dos goles, porque Vinicus cayó derribado por Jesús Navas dentro del área y se pidió un penalti que no se pitó y porque el árbitro le mostró una tarjeta amarilla a falta de cinco minutos para el final del partido.