Sus 11 goles no convencen a Laporta para que el español sea del Barça 24/25 y saldría tras Raphinha
El Valencia apunta a ser su próximo destino de nuevo
Del FC Barcelona saldrán un gran número de futbolistas tras el adiós de Xavi Hernández, un adiós que no se producirá hasta que haya finalizado la temporada, y en este grupo hemos venimos incluyendo a Raphinha como uno de sus miembros.
El internacional brasileño, tras el salto a escena de Lamine Yamal, se ha quedado sin hueco en proyecto culé, al menos de la forma que él lo desea, y de ahí que las opciones de ser importante en un club con grandes aspiraciones pasen por regresar a la Premier League, donde Manchester United y Tottenham Hotspur vienen estudiando su fichaje.
Eso sí, ni mucho menos el brasileño será el único hombre de ataque que utilice Joan Laporta para dar un impulso a la recuperación financiera blaugrana y de ahí que el futuro de Ferran Torres cada vez apunte más lejos de permanecer en la plantilla.
El internacional español ha anotado 11 goles entre todas la competiciones oficiales disputadas por el FC Barcelona esta temporada, siendo esta un cifra nada despreciable atendiendo a que Ferran no ha sido una de las apuestas sistemáticas de Xavi en sus esquemas titulares, pero el jugador no ha terminado de afianzarse en el proyecto a pesar que Joan lapita hizo una inversión muy importante para cerrar su fichaje 2022 pagando 55 millones de euros a un Manchester City que apenas puso resistencia al traspaso.
Y atención, la segunda novedad de estas líneas mira al equipo que está abierto a negociar la compra de Ferran Torres siempre y cuando el Barça sea coherente con sus exigencias económicas: el Valencia.
El conjunto che está atravesando una etapa de incertidumbre institucional y Peter Lim, mandatario del club, podría abandonar Mestella el próximo verano si la situación se torna insostenible próximamente.
A colación de esto es que, a través de fichajes de nivel como el que supondría Ferran, el equipo pueda recuperar el prestigio perdido desde la llegada del magnate y, por qué no, volver a mirar a puestos europeos.