Neymar usará el Barça como trampolín para ser el líder de otro grande
El entorno del jugador mueve los hilos en la sombra buscando un nuevo destino en el que pueda ejercer de líder absoluto y ganar el Balón de Oro.
Neymar ha descubierto en ausencia de Leo Messi que está perfectamente capacitado para liderar cualquier equipo de campanillas. Consciente de que con la vuelta del crack argentino su papel en el equipo volverá a un segundo plano, el astro brasileño estudia lo que más le conviene en un futuro inmediato para que la progresión de su carrera no sufra un estancamiento.
Así se explican las largas que su padre le da a Bartomeu por la renovación de su hijo. Neymar llegó al Barcelona para aprender y consolidarse en el fútbol europeo formando parte de una de las mejores plantillas del continente y al lado de jugadores de primer nivel. La etapa ya está superada y ahora toca dar el salto a otro equipo con aspiraciones que acepte poner en marcha un proyecto que gire alrededor suyo. El salto no será inmediato, pero cuanto más tarde en producirse más barato será el precio de su traspaso. Ahora se encuentra en la mitad de su contrato de cinco años y a partir de la próxima temporada los movimientos sísmicos empezarán a producirse en torno a su fichaje.
Bartomeu es consciente de su situación. Sabe que Neymar quiere ganar el Balón de Oro y que ese sueño nunca se cumplirá si sigue viviendo a la sombra de Leo Messi, que se lleva todos los honores. La relación entre ambos es excelente, pero el entorno de Neymar considera que su presencia en el Barcelona junto al argentino entorpece su progresión como futbolista. Así se entiende que ni Neymar ni su padre estén poniendo mucho de su parte en la prolongación del contrato que le liga al Barcelona porque están más pendientes de utilizar al Barça como trampolín para coger impulso y aterrizar en otro grande con galones de líder absoluto e incuestionable.