Las 5 claves que explican la debacle del Barça en Manchester
Al Barça se le fundieron los plomos cuando Guardiola desactivó la llegada de balones a Leo Messi.
El FC Barcelona ha perdido por primera vez en el Etihad Stadium del Manchester City después de conseguir la victoria en las dos anteriores ediciones de la Champions League. Esta vez Pep Guardiola le ha mostrado al City el camino de una victoria que tiene su explicación y que impide al Barcelona alcanzar de forma matemática la clasificación para los octavos de final de la Champions League.
1.-Se funden los plomos. Con Messi inspirado en la primera mitad, el Barça ha acorralado al City y le ha dejado en una paupárrima posesión del balón del 22 % que se ha traducido en numerosas ocasiones claras de gol que el Barça no ha sabido materializar. Sólo el gol inicial de Messi, pero faltó el tanto que cerrara el partido. Sobraron ocasiones, pero no hubo acierto. Y eso en la Champions League se paga. El Barça brilló en la primera mitad mientras Messi estuvo inspirado. En la segunda parte el argentino bajó su rendimiento y el equipo lo pagó, entre otras razones porque Neymar y Luis Suárez también se moestraron desaparecidos en combate.
2.-El árbitro se equivocó para los dos. Viktor Kassai, el árbitro del partido, se comió un penalti de Umtiti a Sterling en la primera mitad. Y agravó su error enseñándole tarjeta amarilla por simular lo que en realidad fue un penalti como una casa. En la segunda mitad dio como válido el tercer gol del City sin apreciar la asistencia con la mano que el Kun Agüero hizo a Gundogan. Perjudicó, por tanto, a los dos por igual.
3.- Guardiola le gana la partida a Luis Enrique. Esta vez Guardiola no dio facilidades guardando al Kun Agüero en el banquillo. Dejó que el Barça se confiara con la posesión del balón y luego asestó la puntilla a un Barça confiado y convencido de que la segunda mitad sería una merienda de negros, o de "blues". Pep ganó la zona ancha y desactivó los resortes del Barça para hacer llegar balones a Messi, Suárez y Neymar. Ese era el objetivo táctico de Guardiola, impedir que llegaran balones en condiciones a los tres cracks del ataque azulgrana. Y lo consiguió.
4.-Errores individuales. Dejando al margen el tercer gol de Gundogan que nunca debió subir al marcador por mano de Agüero, Sergi Roberto falló estrepitosamente en el primer gol y Ter Stegen pudo hacer mucho más en el lanzamiento de falta de De Bruyne que significó el segundo tanto inglés. Los errores individuales han condenado a un Barça que empezó el partido muy ordenado y acabó groggy y a la deriva.
5.- La clasificación deberá esperar. Un empate le hubiera bastado al Barça para obtener la clasificación matemática para los octavos de final. La derrota le obliga a seguir batallando y tomándose los dos partidos que restan con mucha seriedad para evitar sorpresas.