Stephen Curry anda tras dos All Star y una traición a LeBron James

Ha sido habitualmente un tema recurrente en Golden State Warriors el argumento de que siempre les ha hecho falta, incluso cuando el pastel estaba rebosante de talento, un jugador interior de cierto estatus, dominante y con calidad. Lo más parecido a esta llave maestra en el engranaje de los Warriors campeones fue el australiano Andrew Michael Bogut, y su rendimiento, sin ser difuso, aún quedó lejos de altas expectativas. El futuro, no obsnatente, puede resolver la incógnita de saber cómo pueden rendir los de San Francisco con un buen interior si firman a alguno de estos dos All Stars.

Por un lado, está sonando con fuerza un agente libre que ha pisado territorio solo reservado para las grandes estrellas hasta en cuatro ocasiones, lo cual no es baladí, aunque dicho sea de paso parece que sus años de máxima gloria están lejanos. Con todo, Paul Millsap sí parece un argumento convincente que poner en la nueva tarta que preparan los Stephen Curry, Klay Thompson, Andrew Wiggins, Draymond Green y compañía. Ahora bien, no es la única.

Otra de las posibilidades que asoma en el horizonte para los Warrios es quizá más tentadora por las características del jugador y por su capacidad para engrasar a la perfección en el estilo de juego californiano. Y es que desde el Staples Center se está especulando con la opción de que Marc Gasol rompa lo que le resta de vinculación con Los Angeles Lakers de LeBron James para buscar un destino más propicio para él (se habla de un regreso a España o un último año en la NBA), que tendría en el Chase Center a uno de sus grandes candidatos.

El pívot español quizá no esté en el mejor momento de su carrera, pero sigue siendo un center de gran envergadura y un enorme pasador con buena muñeca y ganas de llevarse un último título. Sea como fuera, ambos, Millsap y Gasol, son ex All Star, jugadores con mucha experiencia y capacidad de amoldarse a una de las franquicias llamadas a estar pujando por grandes objetivos esta temporada, por lo que serían bienvenidos en el norte de California. Así, veremos hacia qué dirección miran los de Mission Bay, pero lo que sí parece claro es que esta vez desean reforzar la pintura, que es un viejo talón de Aquiles en La Bahía.