Durant y LeBron se hacen un favor mutuo, terrible noticia para Harden
El jugador de los Rockets se ha llevado un varapalo tremendo al enterarse
La preparación de la nueva temporada del NBA ya está en marcha y muchas de las franquicias ya han movido ficha para tratar de perfilar su plantilla de la mejor forma posible. Tras el primer bombazo que pusieron este lunes los Phoenix Suns y Oklahoma City Thunder al intercambiarse a Ricky Rubio y a Chris Paul, podría estallar otra de la mano de Los Ángeles Lakers. Los de púrpura y oro han entrado en conversaciones con Brooklyn Nets para que Kentavious Caldwell-Pope viaje hasta allí y Joe Harris, escolta de los neoyorquinos, se traslade a California para incorporarse al actual campeón de la NBA.
The King y Kevin Durant están a un paso de cerrar este movimiento que ha dejado sin aliento a James Harden, el cual soñaba con poder aterrizar al lado de Durant y Kyrie Irving. No obstante, la llegada de un jugador con cualidades semejantes a las suyas podría cerrarle una de las dos vías de escape que tiene la estrella de los Rockets, por lo que su máxima preferencia a día de hoy se ha orientado hacia Philadelphia. El conjunto liderado por Joel Embiid ha tomado la delantera en la carrera por incorporar al MVP de la temporada 2017/2018. No obstante, aún no se ha certificado el movimiento y aunque los actuales campeones están ociosos por incorporar al triplista de los Nets, primero se tienen que acordar los términos económicos que deje satisfechos a ambos jugadores.
No obstante, Atlanta Hawks también se han mostrado muy interesados en hacerse con el talento washingtoniano y podrían tirar la casa por la ventana para convertir al tirador en uno de los jugadores mejor pagados de la liga, ya que en las últimas temporadas los halcones apenas han invertido grandes cantidades en fichajes de primer nivel: socio de lujo para Trae Young.
LeBron James y Anthony Davis deberán mover ficha rápido para no perder la oportunidad de hacerse con refuerzo de primer nivel en su andadura hacia el bicampeonato, aún con la duda de si el gigante aceptará la opción de jugador o no.
Por su parte, Durant espera que sea su año en Brooklyn y, tras una temporada muy complicada en la que se ha pasado casi todo el año en el dique seco, quiere volver a demostrar que es uno de los mejores jugadores de todos lo tiempos en la NBA y tratar de arrebatar el Anillo a unos intratables Lakers: comienza la guerra en los despachos, después se trasladará a las canchas.