Kawhi también somete a LeBron James y The King explota sin remedio
Los Lakers se meten en un callejón sin salida; Sixers y Nets, también
Hay dos asuntos que dejan a Los Angeles Lakers al borde del abismo con solo dos partidos disputados: uno apunta directamente a su estrella, LeBron James, que considera inaceptable el curso de su equipo; la otra tiene que ver, como no, con Russell Westbrook, su rol en el equipo y el poco movimiento que se prevé en los despachos angelinos para cambiar esta situación, al menos durante un largo espacio de tiempo.
Concretamente era noticia que los de púrpura y oro no verían caras nuevas o algunas de las presentes partir al menos hasta el día de acción de gracias, es decir, con una veintena de partidos ya a las espaldas. Es verdad que el calendario de la NBA es, en cierta forma, benevolente con la Fiebre Amarilla a partir de ahora y que teóricamente pueden sacar un importante balance de victorias en esos choques, sin embargo, se prevén más derrotas y eso hace que las preguntas lleguen: ¿conviene esperar tanto? ¿Compensa? ¿Puede ese déficit condenarlos al Play-in o incluso a otra catástrofe?
Sobre todo ello se señala al jugador mejor pagado de la plantilla, el exThunder, Rockets o Wizards, el número 0, porque su rendimiento sobre el parqué no compensa ni remotamente a los resultados que esos más de 45 millones de dólares que cobra por temporada deberían dar. Aunque la salida no sería sencilla, la estrategia de Lakers es dar aire al proyecto y ver si las urgencias de otros equipos provocan un movimiento en cadena que favorezca la salida de Russ; incluso -señala Adrian Wojnarowski en NBA Countdown de ESPN- tratando de involucrar a la sensación Victor Wembanyama.
Sea como fuere, esta solución no agrada a LeBron, que a sus 38 años ve su final cercano y no quiere que la despedida sea tan lamentable como ha empezado. El de Akron habría rajado de puertas adentro contra sus compañeros y el club, aunque por ahora nada va a cambiar ya que, para Lakers, él mismo, como miembro del equipo, es parte del problema.
Filadelfia y Brooklyn también lamen heridas
Tampoco ha arrancado bien el camino para Joel Embiid y James Harden, que tienen un 0-2 en su casillero tras caer ante Celtics y Bucks, y donde el estado de forma del pívot preocupa. ‘La barba’ sí ha comenzado enchufado y ya es el máximo anotador de la liga solo por detrás de DeMar DeRozan, pero eso no basta. Y qué decir de los Nets, que se la pegaron ante Pelicans…
En definitiva, tres castillos de oro se están viniendo abajo sin apenas haber visto pasar el tiempo. Alarma para todos ellos.