Steph Curry prepara la peor traición a Klay Thompson: adiós a su amigo por otro fichaje como Durant
Los Warriors ya han definido el que será su principal objetivo en el mercado
Tras una temporada llena de decepciones y problemas, los Golden State Warriors saben que no se pueden permitir gastar otro año de Steph Curry, de la forma en que lo hicieron. A sus 36 años, el base de los Warriors tiene cada vez más cerca el final de su carrera y de su mejor forma, de modo que, si no aprovechan estas temporadas, la travesía por el desierto puede ser muy larga, pues las ventanas ganadoras son complicadas de alcanzar en la NBA.
Ante esta situación, la gerencia de la franquicia californiana ya ha elegido el que debe ser su principal foco en esta ventana de traspasos. Se trata de Paul George, al que, según Marc Stein, los de la Bahía ya han designado como prioridad dentro de las opciones que hay en el mercado. Pues, ante la negativa de los Clippers de ofrecerle el máximo, PG13 tiene pie y medio fuera de Los Ángeles.
Con George, el futuro de Klay se aleja
Una de las opciones que deben manejar los Warriors es la del Sing and trade, donde el contrato de Klay Thompson puede marcar diferencias. En este sentido, el proceso se basaría en que los Clippers renovaran a Paul George para traspasarlo inmediatamente, mediante un acuerdo con los Warriors, en este caso. Es ahí donde Klay podría entrar de cabeza.
Sin embargo, si hay algo seguro, es que con la llegada de Paul George, el puesto de Klay en el equipo titular desaparecería por completo, dando lugar a que el eterno Splash Brother acabe postrado en el banquillo o saliendo traspasado a un equipo que pueda darle un rol más interesante que el de tirador desde el banquillo.
La realidad es que PG daría un gran salto de calidad al equipo, siendo una gran incorporación que, al igual que en su momento hizo Kevin Durant, con la capacidad de llevar a los Warriors al siguiente nivel. Eso sí, a diferencia de 2016, estos Warriors ya no son ese superequipo invencible, sino que parece que son Steph Curry y cuatro más, pues más allá del base, nadie ha dado la cara en una temporada que ha resultado extremadamente frustrante en Golden State.