Stephen Curry y LeBron James ponen freno a Pau Gasol y el Barça
El pívot debe tomar una decisión
El rotundo fracaso de la sección de baloncesto del FC Barcelona, tras realizar una impresionante inversión (con Nikola Mirotic por medio) y confirmado al perder recientemente la final de la ACB ante CD Saski-Baskonia, ha sido un palo muy duro en la Ciudad Condal. La derrota por el título español ha sido el último estadio de una temporada en blanco (toda vez que el Real Madrid se llevó la Supercopa de España y la Copa del Rey) y ha desembocado en el paso al frente de Bartomeu de cara a la próxima temporada. ¿Cómo?, sencillo, el presidente quiere volver a ilusionar a su hinchada con el fichaje del siglo en la Euroliga: Pau Gasol. Sin embargo, LeBron James y Stephen Curry, ahora, justo cuando parece posible el sueño del barcelonismo, pueden poner freno a la aspiración de la entidad culé.
Tras casi dos temporadas en el dique seco, el mayor de los Gasol, aún hoy el mejor jugador español de todos los tiempos, espera estar listo en próximas fechas para volver a las canchas. Su estado físico es todavía una incógnita, pero no así su mentalidad, que permanece intacta. Y esta última característica del pívot es la que puede evitar el fichaje de campanillas que pretende el presidente del Barcelona, ya que aún se apela en la NBA a esa arma de ET como revulsivo de oro en varias de las grandes franquicias de la mejor liga de baloncesto del mundo.
Porque Meal Ticket en unas condiciones óptimas puede servir muy bien a la causa, con minutos de relleno, en dos de los equipos más importantes del mundo, los cuales, además, tienen por bandera a dos de los jugadores más trascendentales de la última década: Los Ángeles Lakers de King James y los Golden State Warriors de Steph. Ambos clubs históricos piensan en Gasol como elemento de veteranía y de complemento desde el banquillo. Palo culé.
Gasol, por su parte, quiere volver a la Selección española una última vez en la próxima cita olímpica y sabe que el único imperativo que maneja el combinado nacional con él es que esté en activo. Si Pau está jugando, irá convocado. El dilema para Gasol es esperar la llamada de la liga norteamericana o lanzarse de lleno a un retiro de oro en el club que le vio nacer. Lo cierto es que Pau es agente libre y si su físico le respeta puede ser muy útil en Estados Unidos; aunque también es verdad que en Europa sería demoledor.