Stephen Curry tumba a Kevin Durant: duro choque de mitos en noviembre

Cuando uno mira los datos individuales esta temporada de Kevin Durant, no tiene duda, es el claro candidato al MVP de esta temporada, al menos por lo visto hasta la fecha en la NBA. O eso pensábamos. Porque lejos de encontrarnos con una posición estática, unitaria o inamovible sobre la primera aseveración, hay otro canto de sirena más melodioso que se expande desde el otro lado del charco norteamericano y que todavía nos cautiva más. Dígase una cosa de esta música: sí hay quien supera la puesta de largo de KD. Y es otro jugador histórico, legendario, que le quita el trono de esta liga: Stephen Curry, hoy por hoy, el gran candidato al cetro.

Y lo es el playmaker de La Bahía porque no para de romper récords increíbles, como el que fragmentó anoche tras su monumental actuación frente a los Atlanta Hawks de Trae Young, donde anotó 50 puntos en 35 minutos de juego, consiguiendo además 10 asistencias, 7 rebotes, 3 robos y 1 tapón. Y lo es porque es efectivo: 9V1D de los del Chase Center. Es para quitarse el sombrero. Es más, Curry, con su actuación individual, como está ocurriendo durante toda la temporada, no es un fogonazo entre un mar de oscuridad, ya que los Warriors son el mejor equipo de la liga y todo ello sin Klay Thompson, que volverá previsiblemente en un mes y medio.

Y es excepcional porque bate registros: Curry con su 50-10 igualó la marca que hasta el momento solo ostentaban Wilt Chamberlain y Rick Barry en la franquicia californiana. Y no solo eso, también se convirtió en el jugador más veterano, 33 años, en lograr tales números, algo que ya conseguía la temporada pasada. 14-28 en tiros de campo, 9-19 en tiros de tres y ningún fallo desde el tiro libre (13-13) completaron una actuación para el recuerdo. Una más.

Y por eso nos posicionamos en favor de Curry por delante de Durant, porque KD es el máximo anotador de la liga, sí (Curry es el segundo: 29,5 de uno, por 27,6 del otro) pero sus Brooklyn Nets son un súper equipo en el que Kyrie Irving y James Harden, amén del binomio juego-resultados, no terminan de convencer, mientras que los Warriors combinan la genialidad de Curry con la juventud, el orden y un juego armonizado que da resultados; todo ello, como decimos, a la espera del reencuentro en pista de los Splash Brothers. Curry, tras ser el mejor jugador sin equipo de la temporada pasada, ha comprendido la lección, esta temporada si quiere ser el MVP debe tener ambas cosas y a fe que lo está consiguiendo.

Con todo, el estado de forma excepcional de los dos ex compañeros en San Francisco, Steph y Durántula, promete un mano a mano por el MVP de leyenda; uno que quizá tenga su eco en Playoff. Nos gustaría.