Tras la amenaza de Wembanyama, LeBron James rechaza al Team USA, pero Durant se apuntará a 2028
Con la victoria de Estados Unidos en los JJOO, se esperan grandes cambios de cara a 2028
No ha sido el torneo olímpico más tranquilo de la historia del Team USA. Pese a la constelación de superestrellas de la NBA que se unió para alcanzar el oro en París 2024, la realidad es que tanto Serbia en semifinales como Francia en la final, obligaron a LeBron, Curry y Durant, a sacar sus mejores versiones para poder alcanzar la gloria olímpica, la cual podría ser todavía más complicada en Los Ángeles 2028.
De la amenaza de Wembanyama al adiós de LeBron James
Nada más acabar la final entre Estados Unidos y Francia, fue Victor Wembanyama que se apresuró a lanzar el duro y contundente aviso a todos los integrantes del Team USA. Y es que, el francés tiene claro que esta derrota solamente ha servido para encender su llama para ser el verdugo del combinado estadounidense en Los Ángeles 2028: “Estoy aprendiendo y me preocupan mis rivales de aquí a un par de años. ¿En FIBA o NBA? En ambas”.
Unas palabras, las de Wembanyama que advierten de lo que puede pasar en los próximos años. Y es que, si con apenas 20 años y una sola temporada en la NBA ya ha sido capaz de llevar a su país hasta la final de los JJOO, lo que pueda ocurrir de aquí a cuatro años asusta, y de verdad.
Victor Wembanyama after winning a silver medal: “I’m learning, and I’m worried for the opponents in a couple of years.”
— Legion Hoops (@LegionHoops) August 10, 2024
Reporter: “In FIBA or the NBA?”
Wemby: “Everywhere.”
(via @mikefinger) pic.twitter.com/YuXnnc6VAW
Por su parte, en el equipo de los Estados Unidos ya comienzan a vislumbrar que en Los Ángeles, LeBron James ya no podrá ser el líder -y MVP- de su equipo. Así lo afirmó el mismo jugador de los Lakers para ESPN: “No me veo jugando en Los Ángeles 2028”.
En cambio, quién sí que podría formar parte de sus últimos Juegos Olímpicos es Kevin Durant. El baloncestista con más medallas de oro y puntos de toda la historia de los JJOO no se cerró la puerta a la próxima edición del torneo, para la cual ya tendría 39 años y en la que ejercería de líder para hacer frente a la amenaza lanzada por un Wembanyama que solo apunta al oro de cara a la próxima cita olímpica.