Viraje de 180º en Simmons y Lillard y Stephen Curry sopesa un traspaso
Sixers, Blazers, Nets y Warriors, en el punto de mira
Dos de los nombres que acapararon más atención el pasado verano en la NBA fueron Ben Simmons y Damian Lillard, y los dos lo hicieron, cada uno por unas circunstancias específicas, porque no encajan en sus equipos. Pues bien, ninguno de los dos se ha movido de Pensilvania y Oregón, respectivamente, y sin embargo su situación no ha mejorado, lo que vuelve a ponerlos en el foco de las miradas. Además, en los Warriors y con respecto a Stephen Curry, el bache en su juego y la ausencia de Draymond Green puede haber sorpresas.
Situando la actualidad en Portland Trail Blazers y su jugador franquicia cabe decir que su lesión y su posible recuperación va para largo, toda vez que, además, ni el equipo ni el jugador están por la labor de forzar su vuelta a las canchas. Pero también es destacable que Lillard no está a gusto con su situación y la deriva estatista de su equipo no ayuda en este sentido, de modo que ha dicho recientemente que “si de lo que se trata es de jugar para ver si llegamos a una elección de draft alta, eso no tiene sentido para mí”, comentó, sentenciando que “mi objetivo número uno sigue siendo ganar un anillo de campeón”. No obstante, nada ha cambiado y ese quizá sea el problema, cuando el base se recupere de su operación, tal vez sea él quien fuerce para salir.
Y si el futuro de Lillard no se aclara, el de Ben Simmons tampoco cambia, aunque sí tiene importantes novedades que tocan directamente a uno de los firmes candidatos al título, como es Brooklyn Nets. Shams Charania y Sam Amick han comentado que el playmaker podría entrar en una operación veraniega con la franquicia neoyorkina a cambio de James Harden, deseado por los Sixers, aunque la operación, descubierta y posible, genera muchos ‘peros’ por ahora.
Por último, hay que poner el foco en Golden State Warriors y el paso atrás que ha dado su estrella, Stephen Curry (uno que podría incluso haberle sacado de la pelea por el MVP), y es el que tiene que ver con la lesión de Draymond Green, que evidentemente ha repercutido en negativo en el juego del base. Así, sobre un posible traspaso buscado por los Warriors para suplir a Green, se dice que los de San Francisco lo sopesan pero por ahora lo descartan y que solo una recaída de Green llevaría a los del Chase Center al mercado, que cierra el 10 de febrero.