Florentino mete miedo y llama a su puerta: Ronald Koeman, aterrado
La semana fantástica del Real Madrid podría tener un broche de oro
Nadie podía asegurar hace unas semanas que el Real Madrid estaría en diciembre más vivo que nunca en la lucha por la Champions League. Tras la importante victoria que logró el equipo el sábado pasado en el campeonato doméstico frente al Sevilla, el conjunto dirigido por Zidane ha sellado el pase a los octavos de final de la máxima competición continental dejando unas sensaciones muy esperanzadoras frente a un Borussia Mönchengladbach que poco pudo hacer ante el vendaval que se le vino encima.
Y es que los blancos parecen estar enderezando un rumbo que en los últimos meses habían perdido por completo. El equipo está empezando a carburar y sus mejores jugadores están comenzando a enchufarse sacando lo mejor de sí mismos.
Para más inri y contra todo pronóstico, el Real Madrid sigue batiendo récords en Europa: es el único club que ha logrado pasar a la fase eliminatoria en todas las temporadas que ha disputado en la historia reciente de la competición, es decir, desde que la Champions League es denominada como tal. 29 de 29. Esa es la marca que podrá seguir mejorando un club que a día de hoy se ha postulado como un claro candidato a ganar de nuevo el torneo tras haber dejado atrás, aparentemente, las malas sensaciones que han lastrado sus primeros meses de campaña.
Y es que el próximo sorteo que tendrá lugar mañana, 11 de diciembre, supondrá un antes y después para las aspiraciones del conjunto blanco y de un FC Barcelona que, por otra parte, está detonando todo atisbo de resurrección que había mostrado el equipo unas semanas atrás. La dinámica de ambos clubs es totalmente opuesta a día de hoy y el sorteo podría ser la gota que destroce las aspiraciones culés si a éstos, tras haber quedado segundos de grupo, les toca enfrentarse al Bayern de Múnich.
Koeman parece haber quemado todas sus naves con lo que tiene actualmente en la plantilla y no está mostrando credenciales convincentes para postularse como el técnico que necesita el club en las próximas temporadas: mala gestión y cuerda floja para el holandés, Florentino y Zidane ahora son los que sonríen.