Guardiola lo temía y Zidane lo sabía: el Madrid cerca de cuartos de final

Mientras el Real Madrid ha arrancado con buenas noticias, recuperando el liderato y a dos de sus jugadores más desequilibrantes de la plantilla: Marco Asensio y Eden Hazard, el Manchester City (que ayer se despachó a gusto con el Burnley, al que le endosó cinco goles) empieza a ver en el horizonte con más oscuridad la eliminatoria contra el Real Madrid. La seguridad ha desaparecido, y eso pese a la renta que lo skyblues se llevaron del Santiago Bernabéu (1-2). Varias circunstancias acercan a los de Zidane a cuartos de final y alejan a los de Pep Guardiola.

La primera y más traumática ha sido perder a una de las tres estrellas del equipo para lo que resta de temporada. El Kun Agüero cayó lesionado en el choque ante el cuadro de Lancashire, al que los citizens golearon (5-0), y a estas horas se ha confirmado que deberá pasar por el quirófano debido a una grave afección en su articulación, lo que deja fuera de juego al punta argentino de la disputa de los octavos de final ante el trece veces vencedor de la Champions League.

Alguno puede pensar que al City no le fue mal en su día en su vista al coliseo blanco sin el delantero de la albiceleste, jugó Gabriel Jesús y marcó uno de los dos tantos ingleses. Pero hay más problemas para Guardiola. Agosto, mes de la reanudación de la máxima competición continental, es también la fecha en la que la UEFA hará pública la ratificación de la sanción de dos años sin competición continental impuesta al cuadro inglés, un hecho que marcará un antes y un después en sus estrellas, ya que algunas están pendientes del anuncio para irse del club. Un efecto, sin duda, desmoralizador para el trascendental choque.

Unido a ello, al técnico de Sampedor le preocupa la profundidad que adquiere el conjunto blanco (y que entonces, allá por febrero, no tenían en el duelo del Bernabéu) con el extremo mallorquín y con el interior belga. Ambas armas, unidas al estado de ánimo de Benzema y una hipotética euforia merengue por el título de liga, si lo consiguen; sumado a los problemas internos de los skyblue, hacen del Madrid un rival, pese a la desventaja, muy complicado: no tienen nada que perder y esta es su competición.