¡Guardiola tiembla por su gran fracaso! ¡El mejor de Europa y su espina!

El de Sampedor siempre se echará en cara dejarle ir

¡Guardiola tiembla por su gran fracaso! ¡El mejor de Europa y su espina!

Nunca ha ocultado que es una de sus preferencias en la medular y el jugador este año le está dando la razón, de hecho multitud de voces preminentes afirman que es el mejor organizador del fútbol europeo. De ahí que el magnífico estado de forma de Toni Kroos sea para Pep Guardiola una de las mayores preocupaciones de cara al duelo de octavos de final de la Liga de Campeones entre el Real Madrid y el Manchester City.

El alemán presiona, roba, distribuye, asiste, marca y detiene el ritmo del partido a su antojo y en su beneficio. Lo ha hecho desde que comenzara la temporada y ayer en La Romareda lo volvió a hacer con esa plasticidad tan de la nueva escuela alemana del preciosismo, de la que es el máximo exponente (y prácticamente el único superviviente). El de Greifswald fue el arquitecto de los dos primeros tantos del conjunto blanco, en uno asistiendo a Raphael Varane; en el otro haciendo lo propio, previo robo en la salida de pelota maña, con Lucas Vázquez. Con ellos el Madrid sentenció la eliminatoria por la vía rápida.

La Romareda

En la distancia y para Guardiola, estudioso y admirador de los grandes jugadores, los estética y técnicamente mejor dotados, la situación del alemán es un peligro para sus aspiraciones europeas y ya prepara estrategias para disminuir la influencia en el juego merengue del bávaro, que a día de hoy es trascendental. Mejora a Casemiro, Luka Modric, Isco Alarcón y sirve de caramelos a Vinicius, Rodrygo, Hazard, Benzema y Bale.

Posiblemente sea ahora mismo, y junto al brasileño, el futbolista más en forma y más importante del equipo de Zidane, y sus minutos sobre el terreno de juego, en LaLiga, en Copa de Rey y en la Champions League, hablan a las claras de esta jerarquía. Si es un choque de altura, Kroos juega y lo hace todo el partido. Y tanto le gusta el fútbol de Kroos a Pep que la estrella alemana fue el motivo de su marcha de Múnich cuando el club no aceptó darle todo lo que pedía al 8 merengue. Kroos sigue ligado, tantos años después, a la mente de Guardiola. Y seguirá dándole dolores de cabeza.