La Champions atenaza a Carletto, confirmado el peor pronóstico: tras el descarte, Nacho o Tchouameni
Éder Militão dejó claro ante el Villarreal que no está para competir al más alto nivel
La recuperación de Éder Militão tras su grave lesión de rodilla ha generado una gran expectación entre los aficionados del Real Madrid. Sin embargo, su rendimiento en los últimos partidos ha dejado mucho que desear, lo que ha llevado al técnico Carlo Ancelotti a reconsiderar sus opciones defensivas de cara a la crucial final de la Champions del próximo 1 de junio.
El central brasileño, quien sufrió una rotura del ligamento cruzado anterior a principios de temporada, ha trabajado intensamente para volver a su mejor nivel. Pese a sus esfuerzos y a un riguroso proceso de rehabilitación, su rendimiento sobre el terreno de juego ha sido irregular. Sus actuaciones recientes han evidenciado falta de ritmo y confianza, aspectos cruciales para un defensor en encuentros de alta exigencia como los que enfrentará el Real Madrid en Wembley próximamente.
La decepción entre los seguidores y el cuerpo técnico es palpable. Militão, que antes de su lesión se había consolidado como uno de los pilares defensivos del equipo, ahora parece lejos de esa versión que lo catapultó como uno de los mejores centrales de Europa. Sus errores en partidos clave han generado dudas sobre su capacidad para rendir al máximo nivel en momentos decisivos.
Ante esta situación, Carlo Ancelotti ha tomado una decisión contundente. Según fuentes cercanas al club, el entrenador italiano ha optado por no incluir a Militão en el once titular para la final de la Champions League. En su lugar, Carletto deberá escoger entre confiar en la experiencia de Nacho Fernández o en la capacidad defensiva y la buena salida de balón de Aurélien Tchouameni, los firmes candidatos para acompañar a Antonio Rüdiger en el eje central de la defensa.
Nacho, un veterano con años de servicio en el Real Madrid, ha demostrado ser un jugador fiable y polivalente, capaz de desempeñarse en diversas posiciones defensivas con solvencia. Por otro lado, Tchouameni, aunque principalmente un mediocampista defensivo, ha mostrado habilidades para adaptarse a la zaga central cuando se le ha requerido, aportando solidez y dinamismo.
Esta decisión subraya la prioridad de Ancelotti de garantizar la máxima solidez defensiva en el partido más importante de la temporada. La final de la Champions ante el Borussia Dortmund se presenta como un reto formidable y la elección del técnico italiano refleja su compromiso con la victoria, adaptándose a las circunstancias y tomando decisiones difíciles en pro del equipo.