Luis Enrique saca su arma final: acompañará a Dembélé y Mbappé para romper a Joao Cancelo y a Koundé

La tercera punta del tridente aportará todavía más desequilibrio y amenazará más que el español

Luis Enrique saca su arma final: acompañará a Dembélé y Mbappé para romper a Joao Cancelo y a Koundé

El PSG llega al definitivo duelo de Liga de Campeones en Montjuïc, pleno de energías y de efectivos para lograr la remontada y despertar a los culés del sueño en el que está viviendo después de la gran y sorprendente victoria en el Parque de los Príncipes. En este sentido, Luis Enrique dispondrá de inicio de un tridente todavía más afilado del que presentó en la ida, cambiando a Marco Asensio por Bradley Barcola.

Barcola

El ex del Olympique de Lyon es un atacante mucho más vertical e incisivo que el balear. Pues, gracias a su velocidad y capacidad para el desborde, Barcola tendrá la capacidad de liberar de mucha presión a Mbappé y Dembélé, que podrán tener más espacios cuando su compañero galo arranque a regatear y correr por la línea de cal.

Mbappé lejos de Koundé y Cancelo en peligro

Después de ver como entre Jules Koundé y Araujo secaban por completo a Kylian Mbappé, Lucho sabe que deberá buscar alternativas en la posición del 7 para que viva más tranquilo y mucho menos presionado. En este sentido, la entrada de Barcola dará más trabajo a Koundé, que no podrá estar tan pegado a Mbappé, dando así, mucha más libertad al de Bondy.

Por su parte, Dembélé, podría acabar cayendo a la derecha, su mejor posición y donde se encontraría con Joao Cancelo, quien no brilla por ser el mejor defensor en el uno contra uno. Y es que con la entrada de Barcola, Luis Enrique podría pasar de tener un ataque perdedor de duelos a uno con bastantes ventajas sobre la zaga culé.

La puntería, la asignatura pendiente

Si bien es cierto que con Barcola, el PSG gana en desborde, cabe destacar que, entre la dudosa puntería de Dembélé y la del ex del Lyon, los parisinos tendrán mucha menos efectividad. Pues a diferencia de Asensio, cuyo disparo es certero, los extremos franceses, no destacan por su precisión al finalizar. Más bien lo contrario, por desesperar a Luis Enrique con la cantidad de ocasiones que pueden llegar a desperdiciar por culpa de la poca precisión a la hora de buscar portería. Algo que en Champions se paga muy caro.