¡Mourinho desolado! Le sacude la peor noticia en el momento más inoportuno

José Mourinho regresa a una eliminatoria de la Champions League y lo hace, a priori, sin las fuerzas que suele atesorar el míster luso, ya que le asaltan dos sensaciones inquietantes: una es la desolación y otra es la preocupación. La primera le viene de la confirmación de la grave lesión, quirófano mediante, de uno de sus puntales en ataque, Heung-Min Son, que parece se perderá lo que resta de temporada.

La preocupación, por su parte, le viene por esa necesidad que tiene de ganar a un rival, el RB Leipzig, que sobre la historia y el papel es inferior, pero que viene haciendo las cosas muy bien. Los alemanes, además, tienen a uno de los jugadores más en forma y más determinantes del continente, Timo Werner, multipretendido por varios gigantes europeos como el Liverpool, el Real Madrid o el Bayern de Múnich.

Tras la pérdida de su principal referente y estrella Harry Kane, que estará fuera de los terrenos de juego todavía bastante tiempo, y la del coreano, maltrecho en su brazo, The Special One le da la batuta del ataque a dos actores que teóricamente iban a tener un peso más complementario pero que ahora deberán sacar las castañas del fuego a los spurs. Uno es el héroe de la pasada campaña en la Liga de Campeones, Lucas Moura; el otro es un recién llegado: Steven Bergwijn.

Dele Ali será el tercero en discordia en la punta londinense, mientras que Ndombelé, Winks y Lo Celso formarán en la medular. Por su parte los alemanes contarán como principales peligros con el joven atacante germano –que lleva 25 tantos y diez asistencias esta temporada en 31 partidos disputados entre liga alemana, copa germana y Liga de Campeones-, el ex romanista Patrik Schick y el español Dani Olmo. Partido a cara perro de Mou, de los que le gustan, en el Tottenham Hotspur Stadium a las 21.00, hora española.