Y por si fuera poco… ¡Bronca de Zidane con un indiscutible!
El jugador está enfadadísimo
Si bien es cierto que durante toda la temporada ha sido francamente complicado encontrar una explicación o una dinámica lógica en los planteamientos iniciales de Zinedine Zidane, que ha jugado al malabarismo con los nombres y las rotaciones hasta la saciedad, la variante de ayer, que no le salió nada bien, ni la han entendido los aficionados blancos, ni le ha gustado al jugador damnificado: Toni Kroos.
El mejor pasador del equipo se quedó fuera del mismo en el partido más importante y sin un motivo claro que llevarse a la boca más allá del “ha sido una decisión técnica” del míster francés. El equipo sin duda echo mucho en falta la eficacia y consistencia que aporta Kroos, sobre todo un Carlos Enrique Casemiro que, sin la red que supone el alemán al lado, demostró todas sus carencias técnicas en un auténtico compendio de balones perdidos, de los cuales uno de ellos resultó ser la expulsión de Sergio Ramos.
Culpar al brasileño de la derrota sería injusto ya que ha sido el sostén blanco durante amplias fases de la temporada, ahora bien, el mediocampista de la canarinha es lo que es: el mejor en la recuperación pero un jugador limitado en la asociación. De ahí que resulte crucial para el carioca tener al alemán al lado. Pero Zidane decidió lo contrario. Sin control, los Gundogan, Rodri, De Bruyne, Mahrez, Silva y compañía dominaron a sus anchas el centro del campo del Bernabéu, ya que físicamente Modric e Isco nunca pudieron llegar al ritmo citizen, algo previsible.
Y la grada rumiaba el cambio del control, el del germano, pero nunca llegó. Lo esperó hasta el mismo Toni Kroos, que se fue muy enfadado. Zidane no consideró que el ex Bayern fuera una prioridad, pese a lo visto en el partido, y lo dejó en el banco durante todo el choque. Ni qué decir tiene que al mediocampista no le hizo ninguna gracia y montó en cólera por ello. Se fue con mucha bronca, algo de lo que se ha percatado Zidane, que le guste o no le necesita este domingo ante el Barça. El Madrid sin él es menos Madrid.