Skriniar está en el mercado: el Inter identifica su relevo en Alemania
Barça y Real Madrid, muy atentos
Ni Inter de Milán ni Borussia de Mönchengladbach supieron aprovechar la derrota del Real Madrid ante el Shakhtar Donetsk, y firmaron tablas entre ellos. Romelu Lukaku, con un doblete, el segundo tanto en el último suspiro, se erigió en el héroe del encuentro y en el salvador de los suyos. Un partido en el que los italianos contaron con bastantes bajas, como la de Achraf Hakimi, que dio positivo por coronavirus horas antes del pitido inicial.
Pero no fue la única. Porque Milan Skriniar tampoco estuvo disponible, y Antonio Conte aseguraba que se debía a unas molestias. Lo cierto es que el internacional eslovaco hace tiempo que viene estando entre algodones, y se ha perdido bastantes encuentros últimamente. Algo que ha agotado la paciencia del técnico italiano, que bien sabido por todos es que no le tiene en buena estima, y con el que no tiene una relación nada buena.
No hace falta más que echar la vista atrás, y recordar que en la final de la Europa League, contra el Sevilla de Julen Lopetegui, también fue suplente. El ex de la Sampdoria no vive un buen momento, y son muchas las voces que le colocan fuera del Giusseppe Meazza, por una cantidad que ronde los 50 millones de euros. El Barça, el Real Madrid o el Tottenham Hotspur de José Mourinho han sido colocados entre sus pretendientes.
Mientras, el combinado ‘neroazzurro’ ya habría identificado a su sucesor. Porque quedaron muy impresionados con la actuación de un jugador del Gladbach en el partido. Ese fue Matthias Ginter, que es el jefe de la zaga, y se ha convertido, también, en intocable para Joachim Löw en la selección alemana. De hecho, pese a su juventud, formó parte de la plantilla que salió campeona en el Mundial de Brasil de 2014, si bien no jugó ni un minuto.
Formado en el Friburgo, se marchó al Borussia Dortmund, donde estuvo varios años, antes de recalar en el Borussia Park. Ahora, a sus 26 años, está en plena madurez futbolística, y ha desarrollado todo su potencial. Conte lo quiere como esa.
Es una obsesión.