Xavi recibirá encantado este ‘regalo’ de Simeone y Griezmann que ilusionará a todo el barcelonismo
La derrota del Atleti en Milán abre un frente que nadie esperaba en Barcelona
Con la vuelta de la Champions League, Barça y Atlético de Madrid se juegan mucho más que el pase a los cuartos de final. Ambos equipos, pese a estar muy lejos de ser considerados favoritos saben que el pase a la siguiente fase será algo fundamental de cara a la próxima temporada, en la cual se estrenará el novedoso formato del Mundial de Clubes donde participarán hasta 32 clubes de todo el mundo y entre los cuales solo puede entrar uno entre Barça y Atleti, dependiendo de su puesto en el Ránking UEFA.
Xavi y Simeone ya saben la condición para entrar al torneo
Ante esta situación, tanto el conjunto culé como el colchonero saben que para asegurarse una plaza en el próximo mundial deberán hacer una mejor Champions que el otro. En este sentido, si Xavi quiere clasificar a los suyos para la cita mundialista, debe superar esta fase y esperar que el Atleti no lo haga. Por su parte, a Simeone le vale con quedar eliminado en la misma que el Barça, dejando las posiciones del ránking UEFA tal como están ahora mismo.
Es por este motivo que la derrota que sufrieron Simeone y Antoine Griezmann en la ida de estos octavos de Champions ante el Inter de Milán da muchas esperanzas al Barça, que sabe que será muy complicado pasar de los cuartos de final, siempre y cuando sea capaz de eliminar al Nápoles.
Eliminar a un Nápoles crítico y confiar en el Inter
De este modo, el único camino que les queda a los culés para acceder al Mundial de Clubes de 2025 es el de pasar por encima del crítico Napoli que enfrentarán en los octavos de final y esperar que el Inter de Milán cumpla y acabe con el Atlético de Madrid en el Civitas Metropolitano, donde deberán conservar el buen 1-0 que los neroazzurri cosecharon en la ida.
Así pues, buenas noticias para Xavi y todo el barcelonismo, que se puede comenzar a ilusionar con participar en el nuevo Mundial de Clubes de 2025, una competición que el conjunto blaugrana ya veía como un auténtico imposible unos meses atrás.