Zidane crucifica a la joya que llegó como el sucesor de Neymar

A pesar de haber sido uno de los debates del verano hace dos temporadas y de crear unas expectativas extremadamente altas, Rodrygo Goes ha perdido la oportunidad de brillar en el Real Madrid. Desde su debut la temporada pasada frente al Galatasaray en el que anotó un hat-trick, su rendimiento ha decaído enormemente y actualmente es un efectivo muy poco utilizado para Zinedine Zidane y, por ello,  Florentino ya planea usarle en el próximo mercado como moneda para abaratar un galáctico.

La última prueba de que el brasileño no está a la altura del escudo es el partido que disputaron los blancos frente al Shakhtar Donetsk, en el que cayeron de una forma humillante dejando unas sensaciones pésimas. Dentro de la debacle que sufrió el Madrid, que terminó cayendo por 2-3 en su propio feudo, Rodrygo fue uno de los muchos jugadores que han salido más perjudicados del encuentro.

El carioca tenía una oportunidad de oro para recobrar la confianza y demostrar que puede ser un jugador de suma utilidad para el entrenador galo. Un técnico que, por su parte, se encuentra más en la cuerda floja que nunca. Sin duda una derrota en el próximo ‘Clásico’ terminaría por dinamitar las opciones de Zidane de seguir dirigiendo al equipo, y todo hace presagiar, salvo milagro, que los acontecimientos se darán así. En lo que atañe al brasileño, éste llegó como una copia de Neymar en sus primeros años en Europa.

Despertando prácticamente el mismo interés de los mejores clubes del mundo que el actual jugador del PSG, desembarcó en el Real Madrid a cambio de 40 millones que pagó Florentino Pérez al Santos. Tras un comienzo apabullante en las filas de Zidane en el que enamoró a todo el madridismo, se ha ido diluyendo hasta pasar casi desapercibido en los planes del entrenador y sus minutos a partir de ahora serán muy escasos. Tiene mucha calidad, sí, pero carece de otros aspectos futbolísticos que son de suma importancia en un equipo como el Real Madrid.

Por el contrario, el que cada vez está más enchufado y demuestra que es de los pocos jugadores que se encuentra en forma es su compatriota Vinícius Júnior, que se ha echado el equipo a la espalda tras el bajón de rendimiento de las mejores estrellas del club, las cuales deberán cambiar apremiadamente el chip si no quieren que el Barça les pase por encima en el próximo compromiso liguero: Zidane tiene muchas pruebas y cero dudas, Rodrygo al banquillo y Vinícius al campo para jugarse la vida en el Camp Nou.