Riquelme lo ve venir y llora: segunda era Marcelo Gallardo y fichaje de campeón mundial

En el día de su regreso a River Plate, Marcelo Gallardo y su sola presencia, tan imponente como la estatua que lo inmortaliza en el Monumental, es crucial para encaminar en cuestión de horas otro retorno muy esperado por los hinchas: Germán Pezzella está a un paso de firmar y convertirse en el primer refuerzo de la segunda etapa de MG, además de ser el primer jugador en levantar el trofeo en Qatar que regresa al fútbol argentino.

Es probable que haya un contacto en las próximas horas, y el hecho de que se le considere como refuerzo inminente es una clara señal de que Gallardo lo pidió. Así, la "cierta herida que sanar" podrá cicatrizar en Núñez, con la alegría de volver a ponerse la Banda. Y será en los términos que deseaba el central, sin generar conflictos con el Betis, club al que aprecia y valora por haberle permitido consolidarse como un jugador clave en la Scaloneta y en La Liga, donde fue nominado para el 11 ideal de la última temporada.

Si sale del equipo andaluz, su intención es hacerlo en buenos términos, en señal de agradecimiento. Por eso, a diferencia de lo que ocurrió hace unos días, el pedido expreso de Gallardo hizo que desde las oficinas del Monumental se reactivaran las negociaciones con la clara intención de pagar en las próximas horas la cláusula de €4,5M y repatriar al zaguero tras nueve años y medio.




Caído lo del central de Vélez Valentín Gómez, un deseo del DT saliente Martín Demichelis, River demostrará su capacidad de liquidez, ya que se trata de un pago único al contado y libre de impuestos. Así, los caminos se unieron: Germán quería jugar en River, River quería a Germán, y el gesto del Betis de negociar con su capitán y reducir su cláusula de €50.000.000 a una décima parte fue el guiño que en Núñez finalmente decidieron aprovechar.

A la espera de ajustar los últimos detalles con el jugador (en lo que respecta a su contrato, el dinero nunca fue un problema) y con el Betis para que pueda estampar la firma en un vínculo por tres años y medio, el defensor que descansa en Argentina volverá a Sevilla solo para despedirse, mientras el chileno Manuel Pellegrini aguarda a Vitao y Coulibaly para intentar suplirlo.

Aunque los tiempos sean ajustados pensando en los octavos de la Libertadores contra Talleres, el defensor llega en plenitud, listo para formar una zaga ideal con Paulo Díaz y reactivar su cuenta que quedó en 69 PJ en River entre 2011 y 2015, con cinco títulos.