Joan Laporta se harta y lo pone en la calle después de perdonarle un expediente disciplinario
El jugador es noticia por sus reiterados actos de indisciplina.
La derrota del Barça por 2-1 ante Las Palmas dejó mucha tela para cortar. El equipo de Hansi Flick tuvo una de las peores actuaciones en lo que va de la temporada, y varios futbolistas quedaron en el ojo de la tormenta por su pobre rendimiento. Uno de ellos es Pablo Torre, el mediocampista ofensivo que arrancó de titular pero debió ser reemplazado en el entretiempo por su desempeño.
Después de ver esos 45 minutos, Joan Laporta se hartó del futbolista y tiene decidido cederlo a otro club. Lo que ocurre es que en el FC Barcelona advierten que Torre no está enfocado en los entrenamientos, y los reiterados actos de indisciplina empiezan a fastidiar a Flick y al resto de sus compañeros. Si la historia no da un giro rotundo, el joven de 21 años terminará la temporada en otro equipo.
Joan Laporta se harta
Xavi Hernández ya había advertido al presidente culé que Torre no tenía la conducta de un verdadero profesional. De hecho, fue más noticia por su afición a la vida nocturna que por sus actuaciones dentro del campo de juego. Por esa razón, Joan Laporta decidió enviarlo a préstamo al Girona de Míchel, donde tuvo buenos partidos pero no consiguió la regularidad que buscaba.
Con la llegada de Hansi Flick al banquillo culé, Torre fue recompensado con una nueva oportunidad, pero no la aprovechó y su futuro es incierto. Aunque seguirá formando parte de las convocatorias, habrá que ver si vuelve a ser titular, como ocurrió en el duelo ante Las Palmas.
Dura derrota como local
El Barça perdió su primer partido en el Estadio Olímpico de Montjuic, y sus perseguidores le siguen recortando puntos en la pelea por LaLiga. Lo más preocupante del encuentro fue que el equipo de Flick se mostró muy frágil en defensa y sufrió cada uno de los contragolpes comandados por Sandro Ramírez y Alberto Moleiro.
En la faceta ofensiva, los locales tuvieron serios problemas para hilvanar juego. Quizás la muestra más clara de ello fue que el alemán realizó cuatro sustituciones en los primeros 60 minutos de juego, todo un síntoma de lo que fue el partido para el Barça.
