Lamine Yamal no tiene conexión con Lewandowski
El extremo de Rocafonda no conecta con el juego del atacante polaco.
Lamine Yamal está teniendo un arranque soñado esta temporada con el Barça. Desde la llegada de Hansi Flick al banquillo culé, el extremo de Rocafonda continúa evolucionando como futbolista profesional y, además de destacar en los duelos uno contra uno, ha comenzado a brillar en una faceta crucial del juego: las asistencias. Hasta ahora, acumula 11 pases directos a gol en partidos de Liga y Champions, una marca impresionante considerando que aún no se ha llegado a la mitad de la temporada.
El pase más importante hasta el momento fue el que le dio a Ferran Torres. En el minuto 85, el joven de 17 años hizo magia y dejó a mano a mano al exjugador del Manchester City, quien firmó el 3-2 del Barça sobre el Borussia Dortmund. Esta jugada le valió a Lamine el premio al MVP del encuentro.
Raphinha, el más beneficiado
Al analizar los números, se observa que el principal beneficiado de las asistencias de Lamine Yamal ha sido Raphinha. El capitán culé ha convertido en gol los cuatro pases al vacío que recibió del joven extremo. Por su parte, Lewandowski, Dani Olmo y Ferran Torres han anotado dos tantos cada uno gracias a sus asistencias, mientras que Pedri también figura en la lista.
Sin embargo, Hansi Flick tiene un motivo de preocupación: la conexión entre Lamine y Lewandowski se debilita. A pesar de que el delantero polaco, de 36 años, está teniendo una gran temporada y su efectividad goleadora es inmejorable, pero queda claro que su estilo de juego requiere recibir el balón al pie y cerca del área. En contraste, Lamine brilla al encarar con pelota dominada y habilitar a compañeros que atacan el espacio vacío. El técnico alemán deberá encontrar la manera de ajustar estas piezas para que sus dos figuras se complementen y potencien mutuamente en el ataque.
¿Y la defensa?
La victoria en Alemania dejó en evidencia que el equipo culé ha perdido la solidez defensiva mostrada en los primeros partidos, donde se destacaba por su presión alta y el achique hacia adelante. Los rivales parecen haber estudiado y contrarrestado este enfoque, exponiendo debilidades que podrían costar caro en los momentos más importantes de la temporada. Es evidente que Flick deberá realizar ajustes tácticos para devolverle al equipo la seguridad en la retaguardia.