Las discotecas han sido el gran problema de Pablo Torre en el Barça
Pablo Torre ha desaparecido de los planes de Hansi Flick en los últimos partidos, como le ocurrió con Xavi
De un día para otro, Pablo Torre ha dejado de entrar en los planes de Hansi Flick. Y el problema es que no es la primera vez que le ocurre lo mismo al excelente centrocampista cántabro. Le sucedió con Xavi Hernández y después, en menor medida, con Míchel, para repetirse ahora la situación por tercera vez.
Todas las veces ocurrió lo mismo. El jugador deslumbró en la pretemporada, sorprendiendo a los entrenadores en los entrenamientos y dejando destellos en los partidos de preparación, para después ir decayendo su presencia a lo largo de la temporada, hasta dejar de jugar.
Pablo Torre y su vida nocturna
En su primera temporada en el Barça y después de unos primeros meses de rumores de los posibles motivos por los que Xavi Hernández había dejado de contar con Pablo Torre, Culemanía informó de que todo se debía a la vida desordenada de Pablo Torre, que siendo muy joven empezó a tener una vida nocturna demasiado ajetreada. El centrocampista era visto en discotecas, una actividad que los propios seguidores del Barça comprobaban cada dos por tres, al encontrárselo de fiesta.
Todo aquello llegó a oídos de Xavi, que después de hablar, sin éxito, con el jugador, decidió hacerle ver que no era la mejor manera de intentar triunfar en la élite, y menos a su edad y en un club de la exigencia del Barça.
Flick deja a Pablo Torre fuera de sus planes
Y ahora parece que le está ocurriendo exactamente lo mismo. Hansi Flick quedó prendado de su fútbol en verano, hasta el punto de descartar la primera opción del club, darle una salida en calidad de cedido. El alemán vio en Pablo Torre un jugador perfecto para jugar por detrás de la delantera, para aprovechar su llegada y su capacidad de dar el último pase.
De un día para otro, sin embargo, Pablo Torre ha dejado de jugar y muchos ya creen que el motivo vuelve a ser el mismo, la afición del cántabro por salir de fiesta cuando no tiene que entrenar. Si no cambia de ritmos y de aficiones, no le quedará más remedio que salir cedido este mismo invierno.