Pep Guardiola comunica al Barça que el City podría fichar de inmediato a un jugador

El entrenador catalán estaría muy interesado en un defensa del Barça

Pep Guardiola comunica al Barça que el City podría fichar de inmediato a un jugador

Pep Guardiola está viviendo una temporada muy complicada en el Manchester City. El conjunto inglés lleva una racha muy negativa de resultados y necesita cambios urgentes en el equipo. Por eso, después del pasado mercado de verano donde los del Etihad Stadium no gastaron en exceso, una circunstancia muy poco habitual en ellos desde los últimos años, la situación podría cambiar en la ventana de invierno.

En ese sentido, el técnico catalán tiene los ojos puestos en el FC Barcelona y estaría muy interesado en un jugador del club azulgrana. Se trata de Ronald Araujo, el defensa uruguayo que aún no ha debutado este curso con el equipo de Hansi Flick. Aunque ya está recuperado de su lesión y recibió el alta médica, el alemán aún no le ha dado minutos sobre el terreno de juego. Por eso, Guardiola está atento a su futuro y podría lanzarse de inmediato a por él.

Pep Guardiola quiere a Ronald Araujo

El Manchester City ha tenido un bajón considerable en defensa esta campaña, donde está recibiendo muchas ocasiones y goles de los rivales. Es un aspecto que el entrenador de Santpedor quiere cambiar y Araujo sería el arma perfecta para apuntalar la zona defensiva de los citizen. Aunque no tiene la salida de balón deseada por Guardiola, sí que tiene esa fuerza y físico imponente que iría muy bien en la Premier League.

Además, el catalán se quiere aprovechar de las dudas que están teniendo tanto el Barça como el uruguayo a la hora de hablar de su renovación. Acaba contrato en 2026 y ambas partes están en conversaciones sobre su ampliación, pero de momento no se ha llegado a ningún acuerdo. Si en los próximos meses no se consigue, el club azulgrana lo podría vender el próximo verano para evitar que se fuera gratis el año que viene.

El técnico lo quiere ya

Aun así, a Guardiola le interesaría reforzar a su equipo en este mismo mercado de invierno y está dispuesto a pagar de inmediato por el central. Tiene una cláusula de rescisión de 1.000 millones de euros, una cantidad imposible para cualquier equipo, por lo que los dos clubes se tendrían que sentar a negociar. Además, Araujo tendría la última palabra a la hora de decidir su futuro: si quiere quedarse en Barcelona o buscar una nueva aventura en Inglaterra.