Ronald Araujo empieza a tener mala fama en el vestuario del Barça
El defensa uruguayo está siendo criticado cada vez más por su rendimiento

El FC Barcelona empató ante el Real Betis en Liga y todos los ojos estuvieron puestos en Ronald Araujo. El uruguayo fue titular por la baja de Iñigo Martínez y su rendimiento estuvo, otra vez, lejos de lo que se espera de él, al menos en las tareas defensivas. El gol del conjunto andaluz llegó de córner y de un jugador que él marcaba, por lo que en el vestuario está empezando a tener mala fama.
Algunos compañeros ya lo critican por el bajo nivel que está demostrando este curso, lejos del mejor Araujo que se había visto sobre el terreno de juego en los últimos años. Ese central que no dejaba pasar a ningún atacante contrario y no se le escapaba ningún balón aún no está esta temporada, por lo que Hansi Flick prefiere a otros defensas como Pau Cubarsí o el mismo Iñigo Martínez.
Araujo empieza a tener mala fama en el vestuario del Barça
Precisamente, en el tanto que permitió al Betis empatar el partido, Araujo ni saltó ni miró al balón de cara al remate de Natan, a pesar de que era su marca. Este gol hizo que el Barça solo pudiera ganar un punto, y aunque siguió aumentando su liderato en la Liga por la derrota del Real Madrid ante el Valencia, era una oportunidad de oro para escaparse aún más en la primera posición.
Por eso, algunos futbolistas quedaron disgustados y enfadados con la actitud del uruguayo sobre el césped e incluso se le pidieron explicaciones dentro del vestuario. La realidad es que el jugador no está nada centrado y dentro del club, entre ellos Joan Laporta, creen que el central ya tendría cerrada su salida del Barça para el próximo verano, por lo que ya no se preocuparía tanto por su rendimiento.
No se le cerraría la puerta de salida si llega una buena oferta
La entidad azulgrana no tendría ningún problema en vender a Araujo si llegase una oferta adecuada a los despachos. Por lo tanto, si el defensa viene con mucho dinero encima de la mesa y pide salir, no se le cerrará en ningún momento la puerta, ya que tampoco es una pieza indiscutible para Flick.