Está harto de Luis Enrique y ha pedido a Mbappé que le ayude a llegar al Real Madrid

La situación contractual del Paris Saint-Germain es insostenible para varios jugadores de la plantilla, que ya han expresado su malestar y su deseo de irse. La relación de Luis Enrique con varias de las estrellas de la plantilla está totalmente rota, y además de casos como los de Randal Kolo Muani, Milan Skriniar, Ousmane Dembélé o Fabián Ruiz, también nos encontramos con el de Nuno Mendes, que hasta hace bien poco era una pieza indispensable.

Pero ha perdido su condición de titular habitual, aunque las lesiones tampoco le han ayudado a tener más continuidad, y las cosas se pueden poner mucho peor ahora que Lucas Hernández ha regresado tras la grave lesión de rodilla que sufrió hace unos meses. Y, además, Nasser Al-Khelaïfi está trabajando en la incorporación de un nuevo especialista para el lateral izquierdo, como Alphonso Davies o Theo Hernández, lo que complicaría aún más sus opciones.

El canterano del Sporting de Lisboa, lejos de perder el tiempo, ya se ha comenzado a plantear su salida del Parque de los Príncipes, y no ha tardado en ofrecerse a diversas escuadras de élite, entre las que se encuentran el Manchester City, el Liverpool o el Bayern de Múnich. Pero también ha contactado con el Real Madrid, consciente de que Florentino Pérez busca a un nuevo lateral zurdo, viendo el bajón de rendimiento que ha tenido Ferland Mendy, y la nula confianza de Carlo Ancelotti en Fran García. 

Mendes ha querido probar suerte llamando al cuadro blanco, y ha pedido a su excompañero, Kylian Mbappé, con el que compartía vestuario en el PSG hasta hace unos pocos meses, que le ayude en todo lo posible para convencer a la directiva de que se decante por su incorporación antes que por las otras alternativas que controlan. Es joven, tiene 22 años, ya ha demostrado su nivel y su talento, y acumula una sensacional experiencia en la élite.  

Por lo tanto, es una opción muy interesante, si bien en el Santiago Bernabéu tendrían que realizar una inversión superior a los 50 millones de euros para conseguir que salga de la Ligue 1.

Y viendo la mala relación de Al-Khelaïfi y Florentino Pérez, está claro que no pondrán las cosas fáciles.