Sergio Ramos se cansa de esperar al Real Madrid y negocia fuera de Europa

Sergio Ramos tenía la ilusión de poder regresar al Real Madrid, y ser el elegido por Florentino Pérez para cubrir la baja de larga duración de Eder Militao. Parece claro a estas alturas que el cuadro blanco firmará a una cara nueva para la zaga, donde Carlo Ancelotti se ha quedado prácticamente sin alternativas, pero también es evidente que el camero no será la elección final. Porque de lo contrario, ya hubieran contactado con él, algo que no ha sucedido.

Juega con la ventaja de estar libre, y por ende podría llegar con efecto inmediato y completamente gratis. Pero el presidente en ningún momento se ha llegado a plantear esta posibilidad, debido a la avanzada edad que tiene el andaluz, que ya tiene 38 años, y a su largo periodo de inactividad. Sin olvidar los problemas de lesiones que ha sufrido en los últimos tiempos, y por supuesto, la manera en la que abandonó el Santiago Bernabéu en verano de 2021.

Se fue por la puerta de atrás, negándose a renovar su contrato, y solicitando un sueldo muy elevado, que hizo que las negociaciones se rompieran, y que acabara en las filas del Paris Saint-Germain. Una traición que no perdonan en Concha Espina, lo que ha llevado a tomar la decisión de eliminar al canterano del Sevilla de la lista de candidatos a reforzar la defensa. Así que si desea volver a jugar, tendrá que buscarse la vida y ofrecerse a otra escuadra.

Y contra todo pronóstico, el futuro de Ramos se puede encontrar lejos de Europa. Pero no en Arabia Saudí, donde ha recibido diversas llamadas, sino en Brasil. Porque en las últimas horas ha cobrado fuerza un rumor que sugiere que estaría en conversaciones con el Corinthians, uno de los equipos con más caché del continente sudamericano, y en el que podría compartir vestuario con un ex del Barça y del Atlético de Madrid, como es Memphis Depay, otra vieja gloria europea.  

Sergio se resiste a anunciar su retirada, y aún considera que está preparado para competir en la élite. Pero después de que el Madrid lo haya rechazado, puede acabar en Sao Paulo.