6 años son demasiado: Marco Asensio será la sorpresa del mercado

Con Marco Asensio casi todo el mundo del fútbol -desde Florentino Pérez a Carlo Ancelotti, pasando por Luis Enrique, Zidane o todos y cada uno de los aficionados de España y del Real Madrid- tienen la misma sensación: es un jugador con unas grandes cualidades, pero siempre se ve superado por la exigencia diaria, la regularidad que exige el más alto nivel. Con él, las expectativas son muy superiores a las prestaciones y por eso el Real Madrid, tras su desastroso partido de anoche en París y las circunstancias que rodean su situación contractual, ha decidido un destino inevitable: será la sorpresa del mercado.

Empezando por esta última circunstancia, la de su contrato, hay que decir que el balear había esperanzado a ciertos sectores de la zona noble merengue por esos rayos de luz que deja entrever de vez en cuando su clase, pero sucedió lo de siempre: el día a día ha terminado por concretar qué es Asensio, un jugador en el que no se puede confiar para un 11 tipo. De modo que, toda vez que su contrato finaliza en 2023, su renovación se ha bloqueado. Es más, dado que podría irse gratis en junio de 2023, el Real Madrid tratará de venderlo este próximo verano para sacar rédito por él.

Hay que decir en honor a la verdad que el rendimiento de Asensio rara vez es excelso; lo normal en sus temporadas es pasar más o menos desapercibido, con chascarrillos de clase mundial y enormes mares de presencias etéreas, volubles, inconsistentes. Por cada apuesta en firme por él, le deviene una decepción. Y no lo dicen estos detractores del mallorquín en la casa blanca, tras seis años en el club, por su pésima actuación en el Parque de los Príncipes, sino por una larga trayectoria que perfila un carácter inconstante, poco dado a tomar riesgos y posiciones preferenciales en la jerarquía del vestuario que por calidad la corresponderían. Simplemente, el Madrid se ha cansado de esperar por él.

Además, más allá de su contrato, que en la siguiente ventana de trasferencias fija un punto perfecto para dejarlo ir, las dudas con él van a más sobre las ambiciones del club, que pasan por ver en la banda derecha a Kylian Mbappé la temporada que viene. Es verdad que si Asensio decepciona, Rodrygo Goes aún lo hace en mayor medida, pero la cercanía de la finalización de contrato del primero (el brasileño tiene contrato hasta 2025) hacen de este momento el instante perfecto para desprenderse de lo que pudo ser y nunca se manifestó. Asensio tiene las horas contadas en el Bernabéu y pocos le echarán de menos en la grada del coliseo merengue.