“¿Y ahora tú?”: ¡Desbandada! El Barça pierde a un titular a última hora
Leo Messi trata de parar la operación a toda costa
Que una pieza menos, salvo Leo Messi y en menor medida Luis Suárez, puede debilitar en exceso la plantilla del Barça es una quimera. El Barcelona cuenta con un equipo amplio y con una base de juego, más o menos atractiva pero sin duda efectiva, asentada sobre el estilo de un entrenador que afronta su tercera temporada al frente del club blaugrana en la que intentará conquistar su tercer título liguero consecutivo.
Estas premisas son un salvoconducto importante para enfrentarse al inicio liguero con garantías, más si cabe si finalmente el astro argentino llega a San Mamés: ya se sabe que cuando Leo está, todo es más fácil. Ahora bien, los culés saben que si el argentino se cae, la conexión con los otros dos puntas, el francés Antoine Griezmann y el uruguaso, estará en peligro porque hay demasiado girando en el juego azulgrana alrededor de Leo.
Es cierto que el centro del campo ha dado importantes réditos en los últimos años, pero la edad y el desgaste de Sergi Busquets y la posible salida, aunque poco probable, de Ivan Rakitic ponen demasiado peso en tres futbolistas Arturo Vidal, Frenkie de Jong y Arthur Melo, que ahora son vitales. Son tres jugadores fantásticos, que aportan seguridad al proyecto, no obstante, mientras el holandés es indiscutible, el brasileño y el chileno tendrán que disputarse la tercera posición de la titularidad. Y por ahí ve una posibilidad un grande de Europa que insiste en darle a uno de ellos un papel protagonista, le tienta y parece que puede obrar el milagro de ficharle.
Antonio Conte quiere al Rey Arturo para su equipo y quiere convencer primero al jugador y después al Barça de que le permita salir. Conte sabe que puede darle al sudamericano un peso en la medular nerazzurri tan grande como nunca alcanzará en el Barça, y esa es su baza. Al futbolista, que en principio no tenía pensado salir, no le desagrada la posibilidad y quiere ver con cuanta fuerza le quiere el Inter de Milan: si vienen en serio a por él, se irá porque le gusta el fútbol italiano tras su paso por la Juve y porque le agrada ser cabeza de león.