Ancelotti revoluciona su 11: halla un nuevo Benzema y un nuevo Modric, equilibrio y control

La falta de claridad y las facilidades concedidas en defensa fuerzan a un cambio

Ancelotti revoluciona su 11: halla un nuevo Benzema y un nuevo Modric, equilibrio y control

Dijo en su día Carlo Ancelotti, uno de los entrenadores más estáticos en su idea de juego, que el sistema del Madrid debía tender al 4-3-3, sin embargo no le está saliendo bien ese planteamiento últimamente y si bien es transformable ese dibujo fácilmente en un 4-4-2, lo cierto es que, como ya demostró el Barça de Xavi, Carletto planea apuntalar el equilibrio y control de la medular ¿Cómo?, mediante un nuevo Benzema y un nuevo Modric.

Aunque vacilante y moldeable, el once que puede empezar a fijar Carletto puede parecerse a un 4-2-3-1, donde las grandes variables vendrían por dos de las posiciones de los cinco centrocampistas. Sabemos que aunque se lo merezca por el grave perjuicio que está causando al equipo, Ancelotti no sentará a Vinicius, de modo que la banda izquierda tenderá a ensanchar el campo, pero no necesariamente sucederá lo mismo con la derecha. Esa asimetría la pagó cara en Son Moix el Madrid; a favor, los blancos tendrían más control de la pelota y le pedirían a Vini que extienda su rango de acción hacia el centro.

El tridente de la medular podría tender a fijar una pareja de pivotes o por lo menos interiores de amplio recorrido, que podrían ser la formada por dos jugadores entre Tchouameni, Kroos y Modric, seguramnete los dos primeros, cediendo la delantera (de Benzema) a Rodrygo, la derecha a Valverde y la media punta a Dani Ceballos. De esta forma solo Vinicius actuaría como estilete en la ‘medular’, siendo el resto jugadores de control del esférico.

Tchouameni

Escalonadamente, los dos brasileños harían las veces de delanteros, ninguno puro, sino móviles, mientras que se formarían dos franjas, más o menos abiertas, de centrocampistas, cuatro, en la que se pueble el círculo central y se pueda gobernar más los partidos. Ayuda, además, que el lateral izquierdo titular es otro mediocentro, como es el internacional con Francia, Camavinga, que, llegado el caso, bien puede también apuntalar la idea. No cambia demasiado el Madrid, pero la vertiente sugiere la intención de buscar una mayor movilidad, menor previsibilidad y, sobre todo, una apuesta por tener la pelota y el control del ritmo del partido. Veremos si se pone en práctica mañana ante el Al-Ahly (20.00, hora española)