Ancelotti se carga la foto ante el AC Milan: Bellingham, el nuevo orden sin Benzema y los 7 tocados
El técnico incluirá al inglés sí o sí en el 11 y está decido a cambiar el sistema, pero atención a las consecuencias; algunos lo tienen muy complicado
Hay algunos jugadores de la primera plantilla (no digamos ya de la cantera) que lo van a tener muy complicado esta temporada salvo que surjan las lesiones, y no nos ha hecho falta más que ver un aperitivo de partido serio ante el AC Milan, que por cierto se llevó el Real Madrid (3-2), para darnos cuenta de ello. La por EEUU ya da señales. A falta de recibir todos los efectivos y de coger ritmo, el italiano perfila un nuevo once en el que, sin la referencia de Karim Benzema, Jude Bellingham forzará un cambio definitivo, sacrificando muchos efectivos.
El fichaje estrella
La inclusión de Bellingham en el equipo titular del Real Madrid, como ya dijo Ancelotti, es innegociable: el ex del Borussia Dortmund va a jugar sí o sí. Esto no es de extrañar, no en vano el club ha luchado por su calidad y ha pagado, de entrada, 103 millones de euros por él. El problema para algunos integrantes de la plantilla es que ha sido contratado como centrocampista dominante pero Carletto le ve ahora más como llegador, como constructor creativo y eso aprieta mucho las líneas de medio campo para adelante: la punta de Benzema desaparece para darle hueco al de Birmingham y poniendo en aprietos hasta siete integrantes del equipo.
Sin referencia fija, con Vinicius y Rodrygo Goes como indiscutibles y en la búsqueda de un rombo con Bellingham de vértice, los dos brasileños, el inglés y Fede Valverde, el único de los siete centrocampistas -con la salvedad de Arda Güler, que sería el octavo- capaz de hacer de medio caído a la banda derecha, como lanzador de contrataques, se hacen insustituibles, eso deja poco hueco para Joselu, Brahim, el mismo jugador turco, Modric, Kroos, Ceballos y/o Tchouameni; más si damos por hecho que Eduardo Camavinga será titular.
Jugó ante el Milan Ancelotti con Kroos de pivote, una posición que no le favorece al alemán -aunque ayude en la salida de balón- y que no podrá usar el técnico ante rivales de una exigencia física grande: al germano no le da en una campaña para ser el pivote. Aceptemos pues que Camavinga, que ha de tender a ser un 6 o un 8, jugará de 5; con eso, Valverde y Bellingham y el 4-4-2, nos deja siete jugadores peleando por un puesto, siendo los delanteros quienes más complicado lo tienen.