Bartomeu y Messi están cerca de liarla y Piqué lo celebra

A veces las situaciones que parecen irreconciliables necesitan un giro de guion para poder cambiar y dar un giro de 180 grados. No suele pasar en el mundo del fútbol, sin embargo, a veces ocurre. Y cuando lo hace es porque, generalmente, esas dos partes que parecían irreconciliables eligen un enemigo en común contra el que luchar. Es lo que ha pasado en Barcelona.

Piqué se quejó al terminar el encuentro contra el Sevilla sobre las decisiones arbitrales a favor del Real Madrid. Lo hizo a su manera. Dijo que LaLiga ya estaba perdida con el Madrid y que no había nada que hacer viendo cómo se habían dado las dos primeras jornadas de la competición.

Ayer el Madrid ganó a la Real con 3 decisiones polémicas. Las 3 decisiones favorecieron al Real Madrid y en Barcelona han puesto el grito en el cielo. Un penalti, para el barcelonismo inexistente sobre Vinícius Júnior, un gol anulado a la Real por fuera de juego posicional de Mikel Merino y un gol de Karim Benzema en el que parece que se ayuda de su brazo en el control. Barcelona ha estallado.

Bartomeu va a enviar una carta, según se comenta hoy en la Ciudad Condal, a LaLiga, para quejarse sobre el diferente trato a ambos clubes. Messi está con su presidente y parece que ha habido un acercamiento entre ambos que nadie, a estas alturas, esperaba.

La relación entre ellos es tensa, pero gracias al Real Madrid ahora parece que están mejor. Bartomeu va a defender los intereses del club, pues son los suyos propios, y los de su plantilla, hasta el final.

Piqué celebra esto y cree que la presión que ha metido ahora le va a venir bien al Barcelona. Deben, eso sí, cumplir con sus deberes dentro del campo. Ganar todo lo que queda y esperar ahora el pinchazo del Madrid. Los árbitros saben que desde Barcelona ahora están en su punto de mira. LaLiga se juega también en los micrófonos.