Bellingham abre el conflicto más caro: su fichaje obliga a aceptar el fin del relevo de Casemiro
La llegada del crack inglés ha provocado ‘overbooking’ en la medular del Real Madrid
En Chamartín todavía siguen de fiesta tras certificar la llegada de Jude Bellingham a la capital española. El ex jugador del Borussia Dortmund ha llegado con la vitola de galáctico y con la misión de llevar a los blancos al siguiente nivel. Sin embargo, el nuevo proyecto blanco se puede dejar por el camino a un fichaje estrella del pasado verano, Aurélien Tchouaméni, que, si ya tenía pocos minutos, con el aterrizaje de Bellingham todavía tendrá menos.
Lejos del contexto perfecto
Carlo Ancelotti deberá tener mucha mano izquierda a la hora de lidiar con la delicada situación del mediocentro francés. Tchouaméni llegaba procedente del Mónaco con la misión de hacer las veces de Casemiro en la medular del Santiago Bernabéu, quien actuaba como escoba a la hora de destruir todo lo que el rival trataba de generar a partir de la zona de tres cuartos.
El galo ha demostrado tener sobradamente esas capacidades. Sin embargo, no es igual de diestro a la hora de generar juego en estático y aportar en la salida de balón, algo que también sucedía con Casemiro. La principal diferencia, es que Casemiro tenía siempre a su lado a Kroos y Modric, mientras que, hoy en día, Tchouaméni cuenta con jugadores mucho menos pulcros y dedicados a sacar el balón jugado a su alrededor.
Camavinga por encima en la escala de jerarquías
Por otro lado, el fichaje de Jude Bellingham, deja una posición en el centro del campo ocupada de forma permanente. El inglés llega para ser una de las estrellas del equipo y es impensable no verlo como titular desde el primer día. A su lado será importante contar con un jugador de mayor capacidad de distribución en estático como Kroos o Modric, mientras que detrás deberá disponer de un pivote que, si no hay ningún cambio, será Camavinga. El ex del Rennes se ha convertido en uno de los pilares del equipo, bien sea en el centro o en el lateral izquierdo. Sin embargo, Ancelotti haría bien de ubicar al galo en el centro evitando así desaprovechar su talento ubicando a Camavinga como carrilero.
En este entramado de centrocampistas, Tchouaméni queda relegado al final de la cola y a ser la última opción para su entrenador. Otro factor en contra del pivote francés es su falta de adaptabilidad a otras demarcaciones, ya que no reúne las cualidades necesarias para ser interior en el Real Madrid ni puede jugar más atrás porque no tiene los conceptos para ser central.
Así pues, muy malas noticias para el Real Madrid y Aurélien Tchouaméni, que ha visto como con la llegada de Jude Bellingham su posición en el Real Madrid está en grave peligro. Algo que seguro no gustará a un Florentino Pérez que gastó 80 millones en un jugador que ahora es el último centrocampista de la plantilla.