Bronca tremenda de Zidane a su capitán ¡Florentino, quiero un sustituto!

Si uno mira las estadísticas del partido de Copa del Rey entre el Real Madrid y la Real Sociedad, verá que ni Nacho Fernández ni Marcelo fueron de las peores noticias de la amarga noche madridista, más que nada porque hicieron dos de los tres goles del equipo. Sin embargo eso es hacer una lectura superficial. La llegada a la zaga del español y el brasileño, unido a un Eder Militao que ya no puede alzar la voz por su suplencia tras el desastroso partido de ayer, descosió al Madrid, que fue una autopista sin peaje en los ataques de una Real que pudo sentenciar el choque mucho antes. Los blancos concedieron tanto que los 4 goles de los de Imanol Alguacil saben a poco.

Y eso no es compensado por un gol anotado o por garra. A lo sumo el brasileño puede agarrarse a ser un extremo por delante de Mendy, pero ni con esas. Vinicius está que se sale y Hazard está a punto de volver. Tras la caída de anoche en el Santiago Bernabéu, Ferland Mendy no va a ser titular hasta final de temporada, sino titularísimo. Igual que Carvajal. Varane, si ya era insustituible e indiscutible, ahora es imprescindible. Sin duda los tres defensores suspenden y son varios de los señalados, unidos a Brahim Díaz y James Rodríguez.

Hay que decir que Sergio Ramos tampoco estuvo excelso, pero es que sufre por las subidas del carioca. De Marcelo llaman la atención sus carencias físicas y los huecos que permite: sus subidas abrieron una brecha enorme entre líneas de la que no se acordaban en el coliseo blanco con la corrección del francés. Ayer volvieron a verse las costuras de este equipo sin Mendy y es porque Marcelo ofrece en ataque, pero es mucho menos de lo que permite en defensa, que es la liberad de circulación más absoluta. El Madrid, con él, es mucho menos equipo. Y Zidane, que le tiene un gran aprecio, ha detectado este asunto y no le va a temblar el pulso con uno de sus capitanes: Marcelo está fuera.

Su etapa como la conocemos ha acabado en el Madrid. Será, si quiere Florentino Pérez y el club, completamente residual. Es más, ayer mismo desde las oficinas del coliseo blanco se empezó a plantear la posibilidad de traspasarle al final de temporada y llenar su hueco con Sergio Reguilón, cedido en el Sevilla. El de Río, tras la catástrofe de ayer, tiene las horas contadas en el Madrid.