Caído Nico Williams, el Barça quiere a un extremo relegado en la Juve; hay OK de Hansi Flick
El FC Barcelona activa el plan B por Williams.
Es un hecho: Federico Chiesa no entra en los planes de la Juventus para la temporada 2024-2025. En ese marco, desde la dirigencia del equipo de Turín trabaja para buscarle una salida al volante de 26 años, quien tiene uno de los salarios más altos del plantel. Sin embargo, las negociaciones no serán para nada sencillas.
La única certeza en esta historia es que el entrenador Thiago Motta ya tomó una decisión con respecto a Chiesa y no dará el brazo a torcer. “Nuestra postura sobre Federico Chiesa no ha cambiado. No entra en nuestros planes. Hemos hablado. Es una muestra del respeto que tengo por todos. Transparencia, claridad, esa es la forma en la que me comunico con mis jugadores”, dijo en conferencia de prensa ante el debut liguero ante el Como.
La decisión sorprendió al entorno del futbolista y de los hinchas. Es que se trata de uno de los mejores de la actual plantilla pero, por diferentes motivos, no encaja en el plan de juego que tiene en mente Thiago Motta.
Teniendo en cuenta esta situación, los italianos trabajan para vender el pase de Chiesa, descartando cualquier posibilidad de cesión.
En los últimos días, hubo sondeos del Manchester United y Chelsea pero ninguno de los dos está dispuesto a hacer una erogación importante de dinero.
En este contexto, quien ha iniciado negociaciones es el presidente del FC Barcelona, Joan Laporta.
Según informó diario Sport, el club culé consultó las condiciones y estudia la viabilidad de la operación. Incluso, el Barça ya tiene todos los informes médicos del jugador, quién viene de dejar atrás una importante lesión de rodilla hace dos años, y tiene claro que se encuentra en perfectas condiciones. De hecho, fue convocado para disputar la Eurocopa 2024 con la Selección italiana.
Chiesa ve con buenos ojos llegar a La Liga pero para que esto ocurra, el Barcelona debe desprenderse de algunos nombres de su plantilla.
La prioridad absoluta era Nico Williams, pero las dificultades de la entidad blaugrana con el límite salarial hicieron inviable la operación. Ahora, el plan B parece tener nombre y apellido y es del gusto del técnico Hansi Flick.