CR7 se la coló a Koeman: engaño letal que hunde su estancia en el club

El entrenador holandés no está pasando por un buen momento y está siendo más cuestionado que nunca

CR7 se la coló a Koeman: engaño letal que hunde su estancia en el club

En medio de la resaca tras la debacle del último envite europeo el FC Barcelona ya está mirando al mercado invernal para tratar de tocar las teclas posibles y necesarias para resucitar en cierto modo a un equipo que está completamente roto.

Y es que a día de hoy se ha acentuado más que nunca la mala gestión de fichajes de la última ventana. Bueno, realmente el gran problema viene desde varios años atrás en los que el club ha estado cerrando acuerdos que han conllevado la llegada de jugadores de primer nivel por unas cantidades desorbitadas, ya no solo en los traspasos como tal, sino también en los salarios ofrecidos a los flamantes fichajes.

Pjanic

Esto a día de hoy se materializa en una crisis económica que pone en jaque la gestión de las próximas ventanas, a no ser que los jugadores que mejor salario perciben vean la puerta de salida para oxigenar las arcas del club. Y es que, a pesar de las trabas económicas, en el último periodo se produjeron varios movimientos que fueron sumamente cuestionados por los aficionados del club, teniendo su máximo exponente en el fichaje de Miralem Pjanic.

La incorporación del bosnio hubiera sido un gran movimiento por parte de la directiva culé si el club no hubiera dado salida a Arthur Melo, el futbolista llamado a coger el timón del equipo durante las próximas temporadas dada su juventud y alto rendimiento en los primeros compases como miembro del club.

Aquí radica una de las tantas noticias negativas que están sacudiendo a Ronald Koeman desde que aterrizó en Barcelona: CR7 se quedó con la cara bonita de la moneda, el brasileño. Aunque Arthur no comenzó la temporada a su mejor nivel, poco a poco ha ido cogiendo galones en el cuadro bianconero y a día de hoy está retratando la gestión de fichajes que empleó Bartomeu unos meses atrás.

Esto no resultaría tan grave si el centrocampista balcánico estuviera rindiendo de la misma forma en Can Barça pero, al igual que muchas otras estrellas del equipo, está a años luz de mostrar el nivel que se espera de él y su nombre ya se ha sumado a la lista de decepciones de los últimos años: Koeman está desquiciado, ha perdido otra batalla.