Deja plantados a Koeman y Bartomeu y ambos se someten al plan de Messi
El Barça debe optar por una opción B y solo sirve el del argentino
Ronald Koeman quería una revolución en el seno del Barcelona y a estas alturas sus cambios, si llegan, serán menores o de un impacto poco visible. El entrenador neerlandés, pese al pacto no escrito de la directiva con Messi y con respecto a Suárez, sigue tratando de echar al uruguayo y a Arturo Vidal, principalmente para dar entrada a sus dos futbolistas anhelados. El problema para él es que se complican tanto las salidas del charrúa y del chileno, como lo hacen las llegadas de sus dos compatriotas deseados, Memphis Depay y Georginio Wijnaldum.
Sobre el primero hay más avances, ya que el Olympique de Lyon no se ha negado en redondo a negociar por su delantero holandés, máxime si el Barça introduce en la ecuación a Samuel Umtiti, como ha propuesto el propio Koeman. Pero lo del segundo es otra cosa, ya que Jurgen Klopp y el Liverpool han dejado casi sentenciado el culebrón asegurando que el futbolista continúe, al menos un año más, en la disciplina red.
Y el no de Wijnaldum ha sido un duro golpe para Koeman y Bartomeu, que ven como la renovación se detiene. Y es que teniendo en cuenta que si Suárez y Messi continúan y el Barça no es capaz de colocar a Vidal, solo Miralem Pjanic añade savia nueva a la plantilla, pero con la diferencia respecto a la temporada pasada de que ya no está Ivan Rakitic, que se ha ido al Sevilla. El Barça, en septiembre de 2021, está peor que en junio. Koeman esperaba al futbolista del Liverpool, pero sus calabazas le llevan a reconocer como posible la propuesta que hizo Messi por un mediocentro que también está a tiro: Thiago Alcántara.
Tintín había descartado al jugador del Bayern para su medular ya que no ve en él las condiciones suficientes para hacer de contención en la medular culé, sin embargo sin el stopper holandés del cuadro de Anfield no le queda otra que tantear su fichaje. Por su parte Wijnaldum ha aceptado continuar en el campeón inglés por una temporada más, justo lo que le queda de contrato, para quedar como agente libre en junio de 2021, donde podrá ir gratis al lugar que desee. Pero el principal motivo de la renuncia de Wijnaldum al llamamiento de Koeman es que ve bastante más seguridad en el proyecto británico que en el catalán, lo cual hunde las expectativas de un Koeman cada vez más acorralado.