Despedida en Madrid: 9 años, 4 finales de Champions y se va al rival

En las dos últimas citas del Real Madrid en una final de la Champions League, ambas saldadas con victoria merengue, frente al Liverpool de Jürgen Klopp (3-1) y la Juventus de Turín de Massimiliano Allegri (4-1), fue titular Isco Alarcón, que también tuvo una notable presencia en los dos títulos continentales anteriores, en 2016 y 2014 ante el Atlético de Madrid, pero el tiempo del malagueño en el Real Madrid ha acabado, como su contrato, a un paso de expirar, y desde Sevilla -máximo rival del Madrid por LaLiga-, con Monchi y Julen Lopetegui como brazos ejecutores, ya dejan ver que es una opción.

A horas de jugarse el pase a cuartos de final de la Champions League ante el Paris Saint-Germain la puesta de largo del jugador andaluz en el choque sería sorpresa mayúscula, y eso que con Zidane y el mismo Ancelotti fue una pieza fundamental en la cimentación de los grandes éxitos merengues de los últimos años. Es cierto que con las bajas de Mendy, Casemiro y posiblemente Kroos, este en el once, Isco puede ser una remota opción, pero el Madrid y él ya están en sintonía con respecto al próximo verano: se va.

En una entrevista recientemente concedida a Muchodeporte por la figura totémica del Sevilla, Monchi, director deportivo y máximo responsable de fichajes en el club hispalense, este no solo no cerraba la puerta a la opción de hacerse con Isco, que como decimos queda libre en junio, sino que abría de par en par las puertas del Sánchez Pizjuán al genio malagueño: “A Lopetegui le gusta Isco y a mí también”, comentaba en ese citado espacio.

Y ni es casual la referencia al Sevilla ni la pregunta realizada a Monchi en aquel portal, porque el binomio Julen Lopetegui, entrenador del cuadro sevillano, y el todavía jugador del Madrid siempre ha resultado tener una conexión instantánea. Para Julen, como para la mayoría de personas que siguen al conjunto blanco, hay pocos talentos como el de Isco, la diferencia es que el técnico vasco piensa que puede devolverle al mundo del fútbol de élite la clase que atesora, mientras que el Madrid lo da por perdido. Sea como fuere, los 9 años de Isco en el Madrid tocan a su fin y Lopetegui le espera con los brazos abiertos; es más, ni siquiera su sorpresiva alineación hoy ante el PSG va a cambiar eso.