Eduardo Camavinga logra lo imposible: Asensio, Alaba y Modric alucinan
El flamante nuevo fichaje del Real Madrid no se esconde
Sí, ha llegado el segundo fichaje a las filas del Real Madrid tras casi dos temporadas sin tanta cara nueva (y cambios) en la disciplina blanca, y, pese a que se han ido jugadores importantes como Raphael Varane o Sergio Ramos, lo cierto es que los blancos se han reforzado poco pero muy bien con David Alaba y Eduardo Camavinga, un medio centro de una proyección tan grande como la calidad que atesora; un auténtico fichaje exprés que ni Eden Hazard ni David Alaba ni Luka Modric esperaban.
Estos tres cracks, como el resto de la plantilla merengue, miraba al fichaje de Kylian Mbappé y cuando se confirmó muchas horas antes del cierre de mercado la llegada del joven centrocampista de Rennes, todos se quedaron de piedra. Sin embargo se sorprendieron por el movimiento, que no esperaban, pero no por el tipo de jugador, ya que saben que acumula un futuro por delante absolutamente arrollador que ya les amenaza a todos ellos.
Potente, virtuoso y con un exacerbado espíritu de sacrificio en el repliegue pero también con una gran facilidad para superar líneas con el desborde o la filtración de pases en la construcción de juego y en el ataque, Camavinga parece el Paul Pogba moderno: más asociativo, más técnico, más fino; o lo que es lo mismo, perfecto para la elaboración y el trabajo a partes iguales desde la regularidad de la que carece Pogboom. A sus 18 años, el de Micogne es quizá la certeza más potente que tiene la mejor selección del mundo, como es Francia, entre sus menores de 20 años.
Sobre Camavinga cabe decir que, aunque se iniciara como pivote defensivo, su mejor versión surge por delante, en la zona de creación, donde su potencia en conducción y su capacidad para asociarse le hacen un arma importantísima. Y sobre el esquema de Carlo Ancelotti tiene muchas posibles salidas, lo que equivale a una amenaza para todos los grandes cracks de la plantilla merengue, ya que puede actuar como volante en cualquiera de las bandas en el 4-4-2, acompañando a dos de los tres mediocentros clásicos (Casemiro, Kroos y Modric) o incluso jugando de interior, su posición favorita, o de mediapunta ya que tiene un poderoso y certero disparo. Camavinga es músculo y calidad a partes iguales: un fichajazo para el Real Madrid.