El Barça ha fichado a dos cracks mundiales por el precio de uno
Koeman se frota los ojos y no se lo cree: son buenísimos
Había ayer mucha expectación por ver el primer encuentro amistoso de la era Ronald Koeman en el Fútbol Club Barcelona. Consiguió vencer y convencer ante un equipo de Segunda B. Aunque parezca fácil hacerlo sobre el papel, siempre cuesta enchufarse en los primeros partidos y el equipo blaugrana salió desde el minuto uno a imponer la idea que Koeman quiere plasmar este año: posesiones más rápidas, presión alta y juego vertical. La esencia del Barça pero acelerada un poco más, para no hacer del equipo algo monótono y enchufar al de siempre, Leo Messi.
Ayer había muchas ganas de ver al argentino debutar en esta temporada. Lo hizo de titular, como no podía ser de otra manera. Koeman le situó por detrás del punta, Griezmann, en un 4-2-3-1 que ya es de por sí novedad en el Barça. Pero sin duda, las estrellas del partido fueron los dos fichajes, de momento únicos fichajes en debutar, a los que ayer dio el entrenador neerlandés una oportunidad: Pedri y Trincao.
Ambos llegaron en agosto tras cerrarse sus fichajes el verano pasado y el pasado mes de enero respectivamente. El canario fue titular y enamoró a todos, incluido su nuevo entrenador. Pedri es ligero, hábil, lleva el balón pegado al pie y encuentra siempre al compañero. Su juego es perfecto para lo que busca el Barça y la gente dentro del club, incluído el propio vestuario, hablan maravillas de él. Koeman quiere que se quede y tendrá minutos.
Por él salió Trincao, que dejó muestras de su calidad en 45 minutos de juego. El extremo portugués demostró lo que es, un extremo puro que abre el campo y que permite que el equipo tenga otro estilo de juego. Mucho más profundo y todavía si cabe más vertical. El ex del Braga parecía que flotaba sobre el terreno de juego y fue otra de las noticias positivas del encuentro.
Muchos en Barcelona se han despertado hoy con otra motivación. Hay esperanza en la nueva temporada y sobre todo, al ver como estos dos fichajes al precio de uno (entre ambos pagaron 35 millones), pueden ser dos futuros cracks en un futuro cercano. ¡Al loro, que no están tan mal!