El dilema del Madrid: 70 kilos por él o mantener al favorito de Zidane
Posturas encontradas cuando llegan las primeras ofertas en firme por el crack
Es una de las grandes decisiones que deberá tomar el Real Madrid en las próximas fechas: renovar a Varane más allá del 2022 o, por el contrario, vender al internacional francés en los próximos meses antes de que su precio empiece a bajar ante la proximidad de la finalización de su contrato.
Según supo el Real Madrid hace unas semanas, el jugador se está planteando muy seriamente abandonar el Madrid al término de la temporada para embarcarse en otro proyecto tras varios años ya en el club blanco. Raphael cree que lo ha conseguido absolutamente todo con el Madrid y que, para tener nuevos retos motivadores, deberá buscar un club que esté en alza y no uno, como el Madrid, que debe vivir una completa renovación en los próximos años.
A sus 27 años Varane ha alcanzado la madurez plena. Tiene experiencia para dar y tomar en el fútbol de élite y físicamente está mejor que nunca. El de Lille parece haber dejado atrás los continuos problemas musculares que antaño le mantenían en el dique seco cada dos por tres. Hace pocos días llegaron a las oficinas blancas las primeras ofertas procedentes de clubes europeos: Manchester United, Paris Saint Germain y Chelsea ya se han presentado oficialmente. No ha trascendido la cantidad pero no deben andar lejos de los 50 millones de euros.
Ahora bien, es el Madrid quien debe decidir que hacer con Varane. Zidane tiene claro que prefiere que continue. Es su hombre de confianza en la zaga y más aún si Sergio Ramos no continua, como puede terminar ocurriendo. Por su parte, la directiva merengue está más por la labor de cerrar algún acuerdo que deje en torno a los 70 millones que serían vitales para reforzar el ataque del primer equipo.
Vender y coger el dinero o renovar a uno de los mejores centrales del mundo. He ahí la duda. Varane y Ramos llevan siendo la pareja de centrales titular blanca desde hace muchos años pero la prometida renovación madridista podría estar a punto de comenzar y lo haría empezando por una zaga que se quedaría sin capitanes a la vista.