El Madrid se la quiere colar al PSG pero necesita el ok de Mbappé
Sería la jugada maestra que resolvería el fichaje del siglo XXI
El golpe definitivo, la jugada maestra o la cláusula liberadora. Llamémoslo x. Lo importante es que, de ser aceptado por el Paris Saint Germain, esto sería el principio del fin para el jugador en París. O casi. El Real Madrid le ha comunicado a su mayor deseo, Kylian Mbappé, que acepte renovar con su club, el PSG, pero que lo haga con una cláusula clave: establecer una cantidad por la cual, si algún club la alcanza, el delantero tendría libertad absoluta para abandonar la capital gala.
Como es sabido en el fútbol francés, a diferencia del español, no hay cláusulas de rescisión, por lo que un club no tiene por qué aceptar una oferta por elevada que esta sea. De ahí que en el Madrid le hayan pedido a Kylian que sea él quien pida incluirla en el contrato para que, llegado el momento, sea el Real Madrid quien pueda tomar la iniciativa enviando una oferta formal a Al Khelaifi. Así, el dueño del PSG tendría que aceptarla por contrato por muy en contra que este estuviese.
¿Y por qué iba el PSG a incluir una cláusula así en el contrato de su estrella? Pues porque si Mbappé se cierra en banda y pone como condición para renovar que la cláusula se incluya, el club francés estaría ante un gran dilema: no ceder y no renovar a su estrella, pudiendo esta salir gratis en verano de 2022, o pasar por el aro e incluir la cláusula con la esperanza de que, con el paso de los meses, su estrella cambiase de idea y, llegado el momento, rechazase la oferta blanca. Si el PSG lleva a cabo la segunda opción, el mal menor sería que el jugador saldría del club previo pago del Madrid de la cantidad fijada.
De ahí que, casi con toda seguridad, si Kylian presiona para que haya cláusula de salida, la habrá. La cantidad tendrían que negociarla entre el PSG y el jugador, con el Madrid como gran espectador de fondo. Desde el club blanco ya se considera una victoria si Mbappé fuerza para incluir la cláusula, puesto que diría mucho de las intenciones del campeón del mundo, pero en las oficinas del Bernabéu no estarán del todo felices hasta que esta no se incluya y que, además, no fuese nunca superior a los 180 millones de euros.
Si el Mbappé y el PSG firman una cláusula de rescisión por encima de esos 180 kilos en Madrid saben que todo habría sido un brindis al sol y que realmente el delantero se habría decantado por París como ciudad de futuro.