El madridismo se indigna por Brahim, Asensio y el error garrafal de Florentino en el Bernabéu

Ya no forma parte de la plantilla del Real Madrid y, a tenor de su poco protagonismo en el PSG, la salida de Marco Asensio del Santiago Bernabéu el verano pasado se puede catalogar como una gran decisión propulsada por Florentino Pérez, quien no accedió a cumplir con las exigencias del mallorquín para que este siguiera perteneciendo la plantilla dirigida por Carlo Ancelotti.

Eso sí, fueron muchas las campañas que Asensio estuvo enrolado en el proyecto merengue y, aunque en sus inicios dejó sensaciones que le situaron como una futura estrella mundial, a raíz de su grave lesión de rodilla el rendimiento del futbolista comenzó a generar muchas dudas, pero más su actitud sobre el césped.

En este sentido, lo que hoy indigna al madridismo no es que el balear esté fuera del club, ni mucho menos, sino que Florentino Pérez antepusiera la presencia de Marco Asensio en el equipo en lo que provocó la salida de un futbolista como Brahim Díaz.

El crack malagueño está viviendo la mejor temporada de su carrera profesional, pero no olvidemos que Brahim se vio obligado a abandonar el club en calidad de cedido en sucesivas ocasiones, siendo su destino el AC Milan, para disfrutar de las oportunidades que Florentino no le permitió tener en la capital española, entre otros motivos, porque el presidente prefirió contar con Asensio a pesar de sus prestaciones han sido interminablemente criticadas durante los últimos años.

Ya en San Siro el atacante andaluz comenzó a dejar muy buenas sensaciones que, en cierto modo, terminaron provocando que el Real Madrid apostara por recuperarlo el verano pasado, pero el transcurso de la campaña está dejando una gran conclusión que evidencia el error cometido por Florentino Pérez de manera reiterada en el último lustro: confiar en un futbolista que apenas dejó actuaciones reseñables y deshacerse de un habilidoso extremo que, además de estar ofreciendo un nivel de absoluta estrella, aprovecha todas y cada de las oportunidades que le brinda Ancelotti, ya sea partiendo desde el inicio o como revulsivo desde el banquillo.