El Messi más atónito ante el nuevo movimiento de Koeman: venta exprés
No ha terminado de erigirse como indiscutible
A pesar de que ha comenzado la temporada mucho mejor de lo que acabó la última en el FC Barcelona, Sergi Roberto no ha encontrado aún su mejor versión en el esquema de Ronald Koeman. El canterano culé, pese a haber sido uno de los titulares en este primer tramo de la temporada, no ha sabido ganarse la confianza total del entrenador y quizá este sábado, en el partido que enfrenta al equipo contra el Getafe, el jugador tenga una última oportunidad para demostrar que sí que puede ser de gran utilidad para el equipo a lo largo de la temporada.
La llegada de Sergiño Dest puede poner en jaque sus aspiraciones este año en cuanto a minutos disputados. Pese a ser un hombre 'de la casa' y haber jugado prácticamente durante todos los años con gran regularidad, no ha terminado de encontrar su mejor versión y la llegada del americano podría relegarle al banquillo y, por ende, a una posible venta a final de temporada.
Leo Messi ha sido testigo de la evolución del jugador desde que diera el salto al primer equipo. Al principio como centrocampista creador de juego y después como lateral derecho ha sabido como calar en los planes de todos y cada uno de los entrenadores que ha tenido, aunque casi siempre lo ha hecho como ‘el jugador número 12’.
Con la salida de Nélson Semedo al Wolverhampton, todo hacía indicar que el hasta ahora mejor socio del argentino en el carril diestro acumulara todos los minutos en esa posición, pero con el fichaje de Sergiño Dest y el poco nivel que está mostrando en este primer tramo de campaña, está ante la que será su última oportunidad para hacerse con ese hueco.
Tanto Josep María Bartomeu como Ronald Koeman son conscientes de que el canterano es un jugador muy querido por la afición, pero en un club de los quilates del Barça no juega el más querido, sino el que mejor lo hace. Y el catalán de momento no se ha incluido en esa lista, y por oportunidades no ha sido. Desde luego que si el club quiere aspirar a cumplir con sus objetivos este año deberá cambiar el chip y empezar a poner en práctica la meritocracia que últimamente tanto escasea en can Barça.