¡El entrenador que jamás querría el madridismo! "Estuve a punto de firmar"
Dice que no descarta el firmar por ellos algún día. De locos
Hay entrenadores que están destinados a entrenar a un equipo. Casi desde que nace su carrera deportiva podemos decir que van a entrenar a dicho equipo. Pasó con Pep Guardiola y el Barcelona. Desde que el catalán comenzó su carrera como entrenador, en el propio Barça, todos tenían muy claro que antes o después sería entrenador del primer equipo.
Y si lo fue es porque Joan Laporta quería que fuera así. Pues la junta directiva ese verano quería apostar por José Mourinho. Pero el presidente se empeñó en que debería ser Pep. Quizás la decisión más importante en la historia del Fútbol Club Barcelona.
De hecho, Guardiola tenía otra oferta sobre la mesa antes de firmar por el Barcelona. Era del Getafe. Buscaba en Pep dar un salto de calidad ya que manejaban muy buenos informes del técnico catalán. Pero Pep aceptó la oferta de Laporta y ya en la comida donde firmaron el contrato el de Sampedor le dijo a Joan Laporta, “tranquilo Joan, nos vamos a divertir”. Y que razón tenía.
Otro de los entrenadores míticos del fútbol español es Javier Clemente. El vasco consiguió dos ligas con el Athletic Club a mediados de los 80 y fue entrenador de la selección española durante 6 años. Hasta el mundial de Francia 98 donde la selección de España no consiguió pasar de la fase de grupos.
Después de eso estuvo en muchos equipos. En ninguno pudo repetir el éxito que tuvo con el Athletic, pero trabajo nunca le faltó. Ayer en una entrevista dijo algo que tenía callado desde hace muchos años: estuvo a una firma de ser entrenador del Real Madrid en los años 90.
Mendoza, el entonces presidente blanco, le quería, pese ser Clemente un reconocido anti madridista en la época. Solo los flecos impidieron lo que hubiera supuesto uno de los casos más extravagantes del fútbol mundial. Seguro que hubiera sido divertido. Ayer dijo, entre risas, que no descarta entrenar al Real Madrid si las cosas le van mal.
Genio y figura hasta la sepultra. Javier Clemente, te quiere la gente.