Ferran Torres cambia todo para Xavi: el Barça, de pronto, mete miedo

Nadie puede ocultar que los primeros días de Xavi Hernández al frente del Barcelona ya le han hecho bien el equipo azulgrana, que presiona con más intensidad, cierra mejor las transiciones rivales y circula la pelota con una mayor fluidez. Es verdad que no hay excelencia en lo que hace el Barça ahora mismo, pero los primeros pasos en la buena dirección, en la evolución, se han dado. Sin embargo, ahora el fichaje de Ferran Torres en el mercado de enero puede cambiarlo todo para el Barcelona, potenciando su crecimiento.

El extremo del Manchester City pasaba reconocimiento médico esta mañana y puede incorporarse al trabajo con Xavi en los próximos días, pero más allá de ser un gran jugador, uno que es de un perfil muy afín a la filosofía de juego tradicional de la entidad culé, la llegada del jugador implica un giro radical que asienta un equipo que puede ser temible. Porque, tal y como ocurriera en la época dorada de Guardiola en el Camp Nou, parece que parte de la columna vertebral de la Selección Española de Fútbol vuelve a respirar aroma blaugrana.

Ferran siempre ha sido un jugador que ha destacado con España, siendo goleador, asistente y generador de juego y de peligro, amén de un fijo para Luis Enrique, mientras que jugadores como Gavi y Eric García, y veremos si no Nico, parecen fijos en las próximas convocatorias con Lucho. De la misma manera, Sergio Busquets y Jordi Alba siguen estando vigentes en La Roja, pero es que con Ferran parece cerrarse el círculo cuando sea que el Barça recupere a Pedri y Ansu Fati.

Si se dan cuenta, estos jugadores están acostumbrados a jugar a lo mismo y ahora podrán hacerlo siempre juntos, en su selección y en su club, en LaLiga, lo que da seguridad al argumento futbolístico de Xavi y el Barcelona. Por otro lado y salvando las distancias, no es casualidad que la mejor época del Barça coincidiera con la mejor de España y que Ferran haya sido el primer objetivo del mercado de fichajes de la entidad catalana para unirlo a esta generación de oro de nuevos jugadores jóvenes culés, tampoco es casual. El Barça con Ferran configura de nuevo una estructura duradera y convincente, puede que incluso temible.