Florentino Pérez cambia el foco y fija su mirada mucho más cerca
Tras varios años buscando en Brasil ha dado con el nuevo sitio de moda
El presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, ha dado un giro total a la hora de buscar a las nuevas y prometedoras joyas que serán las estrellas del mañana. Fue justo tras la salida de Cristiano Ronaldo, a comienzos de verano de 2018, cuando el máximo mandatario blanco, a través de Juni Calafat, su cazatalentos de confianza, ponía la mira telescópica en dirección a Brasil, cuna de un grandísimo número de futbolistas y que parece ser fuente inagotable de estrellas.
Fueron tres los años en los que Florentino mantuvo el foco de sus operaciones en el país sudamericano mientras Calafat insistía en aquella vía: Vinicius Junior aterrizaba en Madrid ese verano de 2018, Rodrygo llegaba tan solo un año más tarde, en verano de 2019 y Reinier Jesús, su última gran apuesta, en enero de 2020. Pero entonces llegó la pandemia y, como con tantas otras cosas, ya nada volvió a ser igual que en el pasado. Florentino se olvidó del mercado brasileño y fijó su nuevo objetivo en un país mucho más próximo, la vecina Francia y su Ligue 1.
Es cierto que el premio gordo procedente de la liga francesa aun no ha llegado (Kylian Mbappé, por supuesto) pero si ha logrado hacerse con una de esas perlas prometedoras como es Eduardo Camavinga y ahora todo apunta a que en verano de 2022, además del gran deseado, llegará también Aurélien Tchouaméni. El francés, de padres senegaleses, tiene 21 años y está tasado en 35 millones de euros. En el Madrid gusta tanto su precio como su edad y su posición, la de pivote defensivo. Tchouaméni sería el relevo natural para un Carlos Casemiro que poco a poco va entrando en años (29).
De confirmarse en los próximos meses los fichajes de Mbappé y Tchouaméni, sería la constatación de que Florentino y su gente de confianza en la dirección deportiva han girado la mirada hacia Europa y concretamente hacia el país galo. La ventaja principal de ello será que son jugadores ya adaptados al fútbol europeo y que, por lo tanto, no tendrán que pasar por el Real Madrid Castilla como si tuvieron que hacer tanto Vinicius como Rodrygo y el propio Reinier.